Mientras hacía el servicio militar, Javier Floristán –decorador de profesión, en la foto– conoció a un chef. “Como en la mili dispones de mucho tiempo para pensar qué hacer, decidimos que, al acabarla, montaríamos algo de hostelería. Los dos teníamos un perfil muy emprendedor, así que, a los veinte días de finalizar, abrimos una cafetería […]