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Hiperconectividad laboral: aprovecha la Navidad para desconectar (si puedes)

La hiperconectividad laboral tiene graves consecuencias para la salud. Por eso, si puedes aprovechar la Navidad para tratar de desconectar, no lo dudes.

Hiperconectividad laboral: aprovecha la Navidad para desconectar

La hiperconectividad laboral incrementa la probabilidad de sufrir problemas de depresión, trastornos del sueño, ansiedad, insomnio o bajo bienestar psicológico.

Cualquiera que se haya visto en esta situación, o que tenga cerca a alguien que la padece, lo sabe muy bien. Y así lo confirma una reciente investigación elaborada por la Universidad Internacional de La Rioja (UNIR), el Centro Nacional de Condiciones de Trabajo (CNCT) del Instituto Nacional de Seguridad y Salud en el Trabajo (INSST) y la Universidad Miguel Hernández (UMH).

El estudio ‘Hiperconectividad y salud mental en el ámbito laboral’ ha sido realizado a partir de 2.000 encuestas a personas con modalidades de trabajo presencial, teletrabajo e híbrido, procedentes del sector educativo, sanitario, inmobiliario y financiero.

Riesgos de la hiperconectividad laboral

El informe constata una relación entre hiperconectividad laboral y disminución del bienestar psicológico, que puede incrementar los niveles de ansiedad y depresión.

“El uso intensivo de las TIC en cualquier lugar y cualquier momento favorece situaciones de conectividad permanente y multitarea, lo que genera una urgencia de respuesta que interrumpe los espacios de descanso y representa un caldo de cultivo que puede llevar a situaciones de tecnoestrés”, afirma Guillermo García, investigador principal del Grupo TR3S.i (Trabajo líquido y riesgos emergentes en la sociedad de la información) de UNIR y participante en el estudio.

Así pues, conceptos como el trabajo complementario asistido por tecnología, tecnoinvasión, telepresión o conectividad ponen de manifiesto el impacto de la conectividad permanente en la salud mental y la capacidad para hacer frente a las situaciones de estrés en la vida cotidiana y laboral. “De ahí que deriven estados de ansiedad, irritabilidad, agotamiento y alteraciones del sueño, pudiendo llegar a aparecer síntomas de depresión o burnout”, añade.

De este modo, la hiperconectividad laboral puede acabar desencadenando síntomas moderados o severos de ansiedad generalizada y trastornos depresivos, con importantes consecuencias sobre la salud de las personas.

Las mujeres, las más afectadas

Aunque hombres y mujeres presentan niveles similares de hiperconectividad laboral, el impacto en la salud mental no es idéntico.

La investigación desvela que las mujeres hiperconectadas muestran mayor probabilidad de padecer bajo bienestar psicológico, insomnio, ansiedad y síntomas depresivos.

Según los autores del estudio, el impacto en las mujeres se agrava por factores psicosociales. Principalmente, por la dificultad de conciliar la vida laboral y familiar. Esta carga adicional es un factor que puede intensificar los efectos negativos de la hiperconectividad laboral en la salud mental femenina.

Además, detalla que el insomnio, asociado habitualmente a la ansiedad y la depresión, actúa como desencadenante y consecuencia, mediando entre el estrés y los trastornos mentales.

Mayor hiperconexión con la edad

El informe también descubre que el perfil de personas muy hiperconectadas aumenta con la edad. En este sentido, especifica que el uso intensivo de las de TIC, el trabajo híbrido y tener responsabilidades familiares son factores que lo fomentan.

“La relación entre edad e hiperconectividad se asocia con la preferencia por el teletrabajo o esquemas híbridos en trabajadores de entre 35 y 49 años, que suelen tener responsabilidades familiares, lo que los lleva a estar más conectados fuera del horario laboral”, comenta el investigador.

No obstante, el estudio no ha encontrado diferencias significativas por edad en los niveles de insomnio. Esto quizá se explique por el nivel de hiperconectividad de los jóvenes fuera del ámbito laboral.

“Los más jóvenes, aunque menos conectados por trabajo, mantienen niveles altos de conexión personal durante su tiempo libre por las redes sociales u otros dispositivos, prolongando el tiempo de exposición y afectando igualmente el sueño”, apunta García.

Necesidad de desconectar

El informe incide en que las organizaciones con políticas de desconexión digital reducen el grado de hiperconectividad de sus trabajadores, lo que debería traducirse en una mejora de su bienestar laboral.

Sin embargo, ha detectado que los empleados, pese a contar con estas políticas, no las cumplen. Y esto incrementa su hiperconectividad.

De este modo, insiste en la importancia de desarrollar una responsabilidad compartida tanto por la empresa como por los individuos. Hemos de tener en cuenta que favorecer la salud mental no sólo beneficia a los trabajadores, sino que también mejora la productividad.

“Las nuevas tecnologías han favorecido el ámbito laboral, pero también suponen un desafío para la salud mental. Equilibrar los beneficios tecnológicos con estrategias eficaces para mitigar sus riesgos es esencial para un entorno laboral saludable y sostenible”, declara el investigador.

Por eso, la Navidad puede ser un buen momento para tratar de desconectar y reconectar con familias y amigos. De hecho, durante las vacaciones se reduce el estrés, ya que baja el cortisol.

Además, mejora el sueño, lo que repercute en una mejor atención, mayor concentración y mejor predisposición a las relaciones personales, como detallábamos en este artículo.

También se reducen los síntomas que provocan el burnout, mejora el estado de ánimo y aumentan la creatividad y el bienestar emocional, gracias al fortalecimiento de las relaciones sociales y familiares.

¿Cómo lograrlo?

Los investigadores y participantes del informe ofrecen una serie de recomendaciones para combatir la hiperconectividad laboral y sus consecuencias.

Cumplir la ley

Hay que recordar que la desconexión digital es un derecho regulado por la Ley Orgánica 3/2018, de Protección de Datos Personales y garantía de los derechos digitales, afianzado en la Ley 10/2021.

Pese a ello, dos tercios de los trabajadores españoles reconocen que no logran desconectar al terminar su jornada, como contábamos en EMPRENDEDORES.

Fomentar la conciliación

Los autores del estudio aconsejan fomentar medidas como el trabajo parcial, permisos por razones familiares o médicas y servicios de guardería.

Tenemos que avanzar mucho en este ámbito. Apenas el 29% de los españoles tienen facilidades para la conciliación, según una encuesta de InfoJobs, tal y como recogíamos en este artículo.

Buenas prácticas

El estudio recalca la importancia de no revisar correos fuera del horario laboral y limitar el uso de aplicaciones de mensajería con fines laborales.

Formación y sensibilización

Es fundamental informar y formar a los trabajadores sobre los efectos del uso continuo de la tecnología y promover políticas organizacionales claras.

Detox digital

Los autores del informe recomiendan fomentar hábitos saludables, como el ejercicio, evitar pantallas antes de dormir y mantener rutinas de sueño.

Apoyo psicológico

También es aconsejable ponen en marcha intervenciones como técnicas de relajación, meditación o terapias cognitivo-conductuales antes de recurrir a medicación.

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