“Muchos clientes nos dicen que valoran tanto la innovación como el hecho de que, al otro lado, haya alguien que entiende su negocio”

Con 175 años de historia y una sólida presencia en el tejido empresarial, American Express afronta un momento clave: acompañar a las pymes en un entorno que exige más agilidad, digitalización y capacidad de anticipación que nunca.

Juanfran Castuera, vicepresidente corporativo de American Express España, Países Bajos & Foreign Currency Solutions para EMEA, reflexiona sobre los retos a los que se enfrentan las pequeñas y medianas empresas y cómo la compañía está evolucionando para ser un aliado real en su crecimiento.

Las pymes representan el 99% del tejido empresarial español y generan una parte significativa del empleo. ¿A qué retos financieros y operativos se enfrentan?

Las pymes son, sin duda, el corazón de la economía española. Representan la inmensa mayoría de nuestro tejido empresarial y sostienen buena parte del empleo. Pero también son las que más tienen que adaptarse constantemente. 

Esa capacidad de adaptación es clave porque, aunque los retos de fondo no han cambiado, como mantener la liquidez, controlar los costes o mejorar la eficiencia operativa, hoy se enfrentan a ellos en un contexto mucho más complejo. A esto se suma la necesidad de digitalizarse, atraer talento y mantener la competitividad sin perder la esencia que las hace únicas.

En definitiva, las pymes están aprendiendo a moverse en un mundo donde el éxito ya no depende solo de vender más, sino de gestionar mejor, anticiparse y tomar decisiones informadas. Y ahí es donde las soluciones financieras y tecnológicas marcan la diferencia.

En American Express conocemos bien esa realidad: llevamos 175 años acompañando a empresas de todos los tamaños, y sabemos que detrás de cada pyme hay una historia de esfuerzo y de superación. Por eso buscamos ser ese aliado de confianza que les permite avanzar con seguridad, mantener el control y no perder nunca el foco en lo que realmente importa: hacer crecer su negocio.

“Las pymes están aprendiendo a moverse en un mundo donde el éxito ya no depende solo de vender más, sino de gestionar mejor, anticiparse y tomar decisiones informadas”

American Express lleva años acompañando a las pymes en su crecimiento. ¿Cómo ha evolucionado ese apoyo en términos de productos financieros, asesoramiento o acompañamiento tecnológico?

Diría que ha evolucionado tanto como las propias pymes. Hoy no basta con ofrecer una tarjeta o una solución de pago: las empresas esperan un acompañamiento real, alguien que entienda su negocio y les ayude a tomar mejores decisiones. Y ese es precisamente el papel que hemos asumido desde American Express.

Por un lado, seguimos apostando por lo que siempre nos ha definido, seguridad, servicio y confianza, pero ahora lo hacemos apoyándonos en la tecnología y los datos. Hemos desarrollado herramientas que permiten automatizar tareas, digitalizar gastos o integrar la información financiera en tiempo real.

Y, al mismo tiempo, mantenemos algo que no se puede automatizar: la relación humana. Muchos clientes nos dicen que valoran tanto la innovación como el hecho de que, al otro lado, haya alguien que entiende su negocio. Esa combinación de tecnología y servicio personalizado es lo que realmente nos diferencia: no ofrecemos solo productos, sino una relación de confianza a largo plazo.

“Hoy no basta con ofrecer una tarjeta o una solución de pago: las empresas esperan un acompañamiento real, alguien que entienda su negocio y les ayude a tomar mejores decisiones. Y ese es precisamente el papel que hemos asumido desde American Express“

La tarjeta Platinum Business está especialmente diseñada para responder a las necesidades de las pequeñas y medianas empresas. ¿Qué beneficios financieros ofrece que pueden facilitar la gestión diaria?

La Platinum Business está diseñada para cubrir dos de las cosas que más preocupan al empresario: control y flexibilidad.

Por un lado, permite diferir los pagos hasta 30 días sin intereses, lo que aporta un respiro financiero fundamental. Por otro, cada euro de gasto en compras genera puntos Membership Rewards, que se pueden convertir en ahorro directo, viajes o beneficios para la empresa. En otras palabras, el gasto se transforma en valor.

Además, la tarjeta ofrece la posibilidad de emitir tarjetas suplementarias asociadas a la principal para el propio titular u otros empleados, lo que permite centralizar los gastos de equipo, asignar límites personalizados y tener toda la información disponible de forma inmediata. Esto no solo simplifica la contabilidad, sino que mejora el control del negocio.

En definitiva, la Platinum Business no es una tarjeta más: es una herramienta financiera diseñada para ayudar a las empresas a gestionar mejor, crecer con seguridad y aprovechar cada oportunidad.

¿Qué otras ventajas o servicios exclusivos aporta a los titulares?

Diría que lo más interesante de la Platinum Business es que no se queda solo en la parte práctica. También ofrece beneficios que hacen la vida más fácil y cómoda porque comprendemos las necesidades de las empresas. 

Por ejemplo, nuestros titulares tienen acceso ilimitado y gratuito a más de 1.550 salas VIP en aeropuertos de todo el mundo, acceso gratuito al Fast Track y Fast Lane en los aeropuertos de AENA y un abono anual de 250 euros al reservar y pagar un viaje en la Agencia de Viajes Online de American Express con su tarjeta. Son beneficios que, más allá del detalle, hacen que cada desplazamiento sea más cómodo y eficiente, algo que cualquier empresario que viaja con frecuencia valora muchísimo.

Y este año hemos querido ir un paso más allá con experiencias que también aportan disfrute. Por ejemplo, los titulares pueden disfrutar cada mes de dos menús para llevar en Hungry Club by Dabiz Muñoz, disponible en los aeropuertos de Madrid, Barcelona y Málaga. Y con el programa Dining For Two, les invitamos a degustar dos veces al año un menú creado en exclusiva para ellos y un acompañante en algunos de los mejores restaurantes del país, que cerrarán sus puertas al público general para acoger únicamente a nuestros titulares y sus acompañantes. Es una forma de transformar una comida o cena en una experiencia única, y que reconoce el valor de pertenecer a American Express, mientras apoyamos la industria en España.

Además, contamos con el programa Saving Partners, que es muy sencillo: si los titulares hacen gastos con su tarjeta en ciertas marcas y establecimientos colaboradores, pueden recuperar parte de ese gasto en forma de abono.

Y, por supuesto, no podemos olvidar la seguridad, una de nuestras grandes fortalezas. Los titulares de tarjetas American Express cuentan con una protección completa cuando viajan, gracias a los seguros de asistencia médica en el extranjero, de accidentes de viaje, de cancelación de vuelos o de pérdida de equipaje, que incluye, entre otros, con diferente grado de cobertura según el tipo de tarjeta.

La digitalización y la ciberseguridad son dos grandes desafíos para las pymes. ¿Qué papel juega la innovación tecnológica dentro de American Express para mejorar la experiencia y protección de sus clientes empresariales? 

La innovación es parte del ADN de American Express. Evolucionamos con la tecnología para ofrecer productos y servicios que se adaptan a las nuevas necesidades de nuestros clientes.

En el ámbito empresarial, eso significa utilizar la tecnología para hacer la vida más sencilla a las pymes. Desde su perfil, bien sea en nuestra app o vía web, por ejemplo, pueden consultar en tiempo real todos sus movimientos, bloquear o desbloquear tarjetas al instante y recibir alertas de gasto personalizadas. Y detrás de esa sencillez hay sistemas de seguridad muy avanzados, apoyados en tecnologías como la inteligencia artificial, que supervisan cada transacción y detectan cualquier movimiento inusual para actuar de inmediato.

Al final, la ciberseguridad no es solo una barrera de defensa, sino una parte esencial de la experiencia de confianza que ofrecemos. Saber que su información y sus transacciones están seguras es lo que permite a nuestros clientes centrarse en lo verdaderamente importante: hacer crecer su negocio con tranquilidad.

Mirando al futuro, ¿cómo ve la evolución del sector pyme en España y qué papel quiere desempeñar American Express en ese camino?

Soy optimista. Las pymes españolas han demostrado una enorme capacidad para adaptarse y reinventarse. En los últimos años han abrazado la digitalización, han diversificado su actividad y se han profesionalizado mucho más. Ese cambio cultural es muy positivo.

Creo que las empresas que mejor se desarrollarán serán aquellas que logren equilibrar la tecnología con el factor humano, los datos con el propósito. Y en ese camino, American Express quiere seguir siendo un socio sólido, fiable y cercano. Queremos acompañarlas en cada paso, ofrecerles herramientas que les ayuden a gestionar mejor, ahorrar tiempo y aprovechar cada oportunidad.

Somos una compañía centenaria que lleva más de 175 años acompañando a los negocios en su crecimiento, y seguiremos haciéndolo con la misma vocación: ayudarles a avanzar con confianza y a transformar sus aspiraciones en resultados reales.