El Palacio de la Moncloa es la sede de la Presidencia del Gobierno de España además de ser la residencia oficial del presidente del Gobierno español de turno y su familia. Se ubica en el distrito de Moncloa-Aravaca y forma parte de un complejo de, aproximadamente, veinte hectáreas de extensión y que alberga un conjunto arquitectónico de gran relevancia histórica y política.
La residencia principal en la que hacen el día a día el presidente y su familia tiene una superficie de 200 metros cuadrados y cuenta con un total de 8 dormitorios, 9 baños, 3 vestidores y 8 salones. El total de la parcela se extiende a 56.000 metros cuadrados, 33.000 de ellos construidos, e incluye varias zonas verdes, pistas de tenis y pádel, piscina y hasta un helipuerto.
Teniendo en cuenta todos estos elementos, Casavo, plataforma inmobiliaria que conecta a vendedores y compradores de casas, ha valorado la propiedad de la residencia oficial del presidente del Gobierno de España en torno a los 125 millones de euros. La estimación procede de su avanzada tecnología brindando una perspectiva objetiva en un rango de valores.
125 millones ¿de qué?
Para llegar a los 125 millones se ha estudiado principalmente el precio medio de la zona, considerando únicamente los metros construidos de la parcela. Partiendo de que el precio por metro cuadrado de un activo en buen estado en ese territorio ronda los 4.000 euros, la plataforma ha analizado también todos los chalets anunciados allí en el último año, obteniendo un valor unitario medio de 3.780 euros el metro cuadrado.
Aplicándole a estos precios el margen de negociación correspondiente y atendiendo a las características concretas del inmueble ya mencionadas, Casavo concluye que 125 millones sería una tasación objetiva.
No obstante, es relevante destacar que la cifra no tiene en cuenta el valor adicional atribuido a esta propiedad debido a su condición de Bien de Interés Cultural. Además, tampoco considera los otros 12 edificios que forman parte del complejo, conectados entre sí mediante un sistema de túneles subterráneos.
Más allá de su valor económico, esta residencia oficial simboliza la historia y el poder político del país, habiendo sido testigo durante décadas de trascendentales decisiones y transformaciones que han dejado su huella en el destino de la nación.
