El proceso sucesorio iniciado hace décadas por Rupert Murdoch al fin ha llegado a su fin. El magnate, que sopló 94 velas en su tarta de cumpleaños el pasado mes de mayo, por fin suelta el cetro de su imperio mediático y lo deja totalmente en manos de su hijo Lachlan.
Y al final todo ha sido más sencillo y prosaico que lo que podríamos imaginarnos, muy diferente de los manejos, conspiraciones y puñaladas por la espalda que pudimos ver en la serie de ficción Succession, que supuestamente está basada en la familia Murdoch y el traspaso de poderes de su imperio.
De hecho, hay grandes similitudes, como contábamos en este artículo. Por ejemplo, el cabeza de familia de la ficción, Logan Roy, es el fundador del conglomerado Waystar Royco, un imperio corporativo propietario de ATN, canal de noticias de corte conservador, trasunto de Fox; un periódico sensacionalista como New York Globe, similar al New York Post; la editorial Northstar Publishing, parecida a Harper Collins; e incluso el estudio de cine Waystar Studios, inspirado en 21st Century Fox.
Apuesta conservadora de Murdoch
La decisión de Rupert Murdoch ha sido la esperada, dejando a su hijo Lachlan al mando de todo el conglomerado. De hecho, ya estaba al frente, puesto que hace un par de años que asumió la presidencia de News Corp. y Fox Corporation. Aunque el empresario se resiste a retirarse por completo, manteniéndose en el cargo de presidente emérito.
El traspaso de poder ha sido posible gracias al acuerdo alcanzado por padre e hijo con el resto de los herederos, Grace, Chloe, Prudence, Elisabeth y James.
“Se establecerán nuevos fideicomisos en beneficio de Lachlan Murdoch, Grace Murdoch y Chloe Murdoch (los ‘fideicomisos de beneficiarios restantes’), y Prudence MacLeod, Elisabeth Murdoch y James Murdoch (los ‘beneficiarios salientes’) dejarán de ser beneficiarios de cualquier fideicomiso que posea acciones de News Corp. o Fox Corporation. Los nuevos fideicomisos en beneficio de los beneficiarios salientes recibirán una contraprestación en efectivo, financiada en parte con los ingresos de la venta pública de aproximadamente 14,2 millones de acciones ordinarias ‘Clase B’ de News Corp. y aproximadamente 16,9 millones de acciones ordinarias ‘Clase B’ de Fox Corporation, anteriormente en posesión del Murdoch Family Trus (MFT)”, detalla la compañía en su comunicado.
Así pues, tras estas transacciones, LGC Holdco, compañía perteneciente a Lachlan, Grace y Chloe, será la propietaria de todas las acciones de News Corp y Fox Corporation que estaban en poder del MFT.
Además, estos tres hermanos mantendrán el control de voto respecto a las acciones de News Corp y Fox Corporation propiedad de LGC Holdco hasta 2050, momento en el que pasará a recaer exclusivamente en Lachlan Murdoch, a través de su director gerente designado.
Aunque todo haya seguido un curso ‘natural’, el proceso tampoco ha estado exento de cierta polémica. The New York Times recuerda que Rupert y Lachlan trataron de modificar unilateralmente los términos del fideicomiso irrevocable de la familia Murdoch y privar de sus derechos a los hermanos mayores de Lachlan, es decir, Prue, Liz y James.
Dicha propuesta fracasó inicialmente en los tribunales, pero ha sido determinante para llevar a ambas partes a la mesa de negociaciones y alcanzar el pacto ahora anunciado.
De acuerdo con las estimaciones que publica el diario estadounidense, cada uno de los tres hermanos mayores de Lachlan recibirán 1.100 millones de dólares por todas sus acciones en el imperio, según fuentes conocedoras de las negociaciones.
El periódico asegura que esta cantidad es sustancialmente superior a la que Lachlan estaba dispuesto a pagar en las negociaciones previas de compra, pero pone fin a largos años de disputas.