EIT Food, la iniciativa de innovación alimentaria líder en Europa que trabaja para hacer que el sistema agroalimentario sea más sostenible, saludable y de confianza, cuenta con distintos programas para construir un sistema alimentario preparado para el futuro. Entre ellos está Test Farms, cuyo objetivo es vincular a empresas emergentes o individuos que desarrollan soluciones agrícolas con agricultores y tierras de prueba para realizar un proyecto piloto.
Al habilitar estos enlaces, EIT Food ayuda a que ideas innovadoras relacionadas con la tecnología agrícola puedan validar y probar sus productos y servicios, mostrar su negocio a clientes e inversores y, finalmente, apoyar la transformación tecnológica en la agricultura europea.
MicrofySystems fue seleccionada en 2022 para participar con Honey.AI, el primer microscopio inteligente que realiza análisis de calidad en miel de forma automatizada.
Iratxe Perales, CEO y cofundadora de la compañía, nos cuenta cómo ha sido su paso por este programa de EIT Food.

¿Cómo conociste el programa Test Farms y por qué te animaste a participar en él?
Lo conocí en una newsletter de EIT Food. Después de haber ganado los Innovation Prizes en 2019, siempre las recibo y las reviso atenta para ver qué nuevos proyectos y convocatorias hay, así como eventos, porque es muy interesante y vale la pena estar al día de sus actividades.
Además, en ese momento justo habíamos sido seleccionados para ingresar en el programa de aceleración EIT Food FAN de 2022 y por lo tanto estábamos muy relacionados con el ecosistema en general. Recuerdo que profesionales de EIT Food presentaron el programa unos días más tarde en el Kick-off de la aceleradora.
¿Qué es y para qué sirve Honey.AI?
Honey.AI es un microscopio automático low-cost para el sector de la alimentación. Básicamente se trata de un microscopio convencional que hemos automatizado completamente y que trabaja con un módulo de procesado de imagen e inteligencia artificial en la nube. Por lo tanto, permite realizar análisis de calidad en muestras como un experto haría, pero de forma 100% autónoma.
La primera aplicación de nuestra tecnología ha sido para el sector de la miel. Honey.AI es capaz de realizar diversos análisis de calidad en miel de forma rápida, sencilla, autónoma y, sobre todo, barata.
Nuestro objetivo es permitir a la industria de la miel que sea independiente de laboratorios externos y que mejore el control de su producto y sus procesos, también reduciendo los costes operativos. Adquiriendo un Honey.AI se pueden realizar diversos análisis en mieles, tales como análisis polínico, de levaduras, de color, de mielatos, etc.
¿En qué fase de desarrollo estaba y qué resultados necesitabais probar con él?
Honey.AI funciona con unos modelos de inteligencia artificial que deben “entrenarse” con fotos reales para que puedan aprender bien y tener una buena precisión.
A este módulo le hemos mostrado ya más de 180.000 imágenes de diversas mieles para poder reconocer decenas de especies polínicas (más de 75). Hemos entrenado el sistema, especialmente con mieles ibéricas, y la precisión es buena en mieles españolas y portuguesas, pero para poder comercializar nuestro producto en otros países debemos primero estar seguros de que hemos cubierto todas las especies botánicas presentes.
Nuestros siguientes mercados objetivo son Francia, Italia, Grecia y Alemania. Es muy importante para nosotros validar el sistema antes de lanzarlo, para ver que realmente somos precisos y damos buenos resultados.
Una vez seleccionados para participar en Test Farms, viene el proceso de matchmaking con el agricultor. ¿En qué consiste?
En este caso debes indicar qué país te interesa y qué plan de testeo quieres realizar. Resumes brevemente qué buscas y qué tipo de usuario final necesitas. EIT Food busca por ti potenciales opciones y se acuerda en que términos se realiza la colaboración. Es todo muy flexible y el proceso es sencillo.
Estáis realizando la validación del robot Honey.AI en Italia, concretamente con Conapi y con Piana Ricerca. ¿Qué relación habéis establecido con ellos y qué plan de trabajo diseñasteis?
La validación la estamos realizando ahora. La instalación del sistema y la formación sobre el uso del robot fue a principios de junio.
Actualmente se ha hecho más del 60% de las muestras esperadas, incluyendo varios tipos de mieles. Conapi también quiere probar otras funcionalidades aparte del análisis polínico. La idea es analizar las mieles con Honey.AI y luego hacer una validación cruzada con los resultados obtenidos manualmente por el laboratorio Piana Ricerca. De estas formas podemos ver dónde necesitamos entrenar mejor el sistema porque todavía presenta errores de reconocimiento.
¿Cuánto duró la fase de prueba? ¿Qué fue lo más complicado?
El proyecto se inició en enero, definiendo bien el plan de trabajo, y Conapi nos mandó mieles italianas para extender nuestras bases de datos y entrenar el sistema para el nuevo país.
En junio nuestro experto viajó a Italia a instalar el microscopio y desde entonces lo están probando allí. Lo más complicado es adaptarse a los plazos del usuario final. En esta colaboración ellos no reciben un pago por el trabajo realizado, por lo que es esencial que lo puedan complementar con su día a día. Actualmente estamos en campaña de miel y tanto Conapi como nosotros tenemos mucho trabajo.
¿Obtuvisteis los resultados que esperabais?
De momento estamos muy contentos con la colaboración. Conapi y Piana Ricerca se están involucrando mucho y nos ayudan a entender los resultados y a ver cómo mejorar. Estamos consiguiendo los objetivos y conclusiones que esperábamos.
¿Qué ha supuesto para Honey.IA haber participado en Test Farms?
Ha supuesto poder realizar una actividad que debíamos hacer para poder entrar en un mercado internacional, con la ayuda de EIT Food, que acelera todo mucho, y además subvenciona el coste.
¿Qué papel ha jugado EIT Food en todo este proceso?
Estamos contentos, porque es un programa muy sencillo al que aplicar y realmente vale la pena. Es muy flexible, nos sentimos con un gran soporte y la búsqueda del partner la hicieron ellos.
¿Recibisteis apoyo financiero para costear el programa?
Sí, el programa incluye 3.000 euros de subvención para costear el viaje y otros gastos que puedan surgir. Nos habría gustado que se pudiesen cargar también los costes de personal o del robot, pero entendemos que cada programa es distinto.
¿Cómo valoráis esta iniciativa de EIT Food?
Genial. Creo que faltan muchos programas como este. Al final, la validación es un paso obligatorio cuando lanzas cualquier producto o servicio al mercado, y siempre suele ser la gran olvidada. Creo que es un gran programa, y aunque tiene poco presupuesto, lo compensa al ser fácil de aplicar y tan flexible.
¿Por qué animáis a otras empresas a participar en el programa?
Porque te permite entrar al ecosistema EIT Food de forma rápida y sencilla, y así, aprovechar su red para encontrar un usuario interesado en validar tu tecnología, que luego además puede convertirse en cliente.
Si estás interesado en recibir más información sobre el programa Test Farms de EIT Food, puedes solicitarla a través de este correo electrónico: melissa.comellas@eitfood.eu