Bloomest, la franquicia de lavanderías autoservicio integrada en Grupo Miele, ha puesto en marcha su primera tienda en Campo de Criptana (Ciudad Real). Tras un año y medio en el mercado español, y a través del modelo de franquicia flexible, ha logrado tejer una red que “supera las 60 unidades, con un concepto diferente de lavanderías autoservicio sustentado en la calidad, el servicio, la atención al franquiciado y, sobre todo, al cliente final a través de la tecnología”, recuerdan desde la central. A partir de aquí, la cadena prevé llegar a los 300 establecimientos en cinco años en España, 20 de ellos en Castilla-La Mancha, “lo que va a suponer 1 millón de euros de inversión directa con la marca, 600.000 de ellos en el territorio en obra civil a través de empresas locales”.
Durante el confinamiento, Bloomest ha mantenido el 90% de sus tiendas abiertas, “siguiendo las precauciones establecidas por parte de las autoridades sanitarias y ayudando a los franquiciados en todas las claves para hacer frente a la crisis”. Subraya Gianluca Falchi, responsable de Negocio de Bloomest en Iberia, que no cobran royalty. “El único coste que los franquiciados tienen con nosotros es el detergente, del que hemos rebajado su precio de compra, para hacer más asequible ese gasto. Otra iniciativa que hemos puesto en marcha es la de prolongar tres meses la garantía de las máquinas a todos los asociados de España, considerando que en los tres meses de confinamiento la actividad ha sido baja”.
En ese periodo, además, la franquicia ha abierto un total de 5 tiendas, en Almendralejo (Extremadura), Bilbao, Majadahonda (Madrid) y dos en Lisboa.
