Telescopios, puntos limpios inteligentes y otras iniciativas que fomentan el ahorro de recursos y el cuidado de las personas con Alzheimer fueron los proyectos vencedores de la VI edición de los Premios +50 Emprende, celebrados en Madrid.
Durante la jornada, promovida por Generación SAVIA y la Fundación Endesa, doce finalistas presentaron sus ideas ante un jurado de expertos y compitieron por estos galardones que reconocen el emprendimiento sénior y su papel en la continuidad del tejido empresarial español.
El primer puesto se lo llevó Eduardo Ferrer (63 años), de Slimop Space seguido de la francesa Delphine Hatsadourian (53 años) con SwiftOn y Rodrigo García (59 años) por Dekipling.
Además, en reconocimiento a la innovación en materia de sostenibilidad, Juan Gutiérrez (50 años) inauguró con Agrolinera el galardón de Emprendimiento Verde, con el objetivo de conmemorar las ideas centradas en transición energética y economía circular.
La inteligencia artificial, la sostenibilidad y el factor humano fueron algunas de las temáticas más valoradas entre las propuestas, donde la innovación con propósito estuvo presente desde dispositivos tecnológicos hasta en obras de arte o libros.
Para esta edición se presentaron más de 200 iniciativas, lo que supuso un total de 480 emprendedores. Un hito que ha superado los récords registrados hasta la fecha y se ha consolidado como el evento de emprendimiento senior más importante de España.
Primer premio: Slimop Space
Eduardo Ferrer es el CEO y cofundador de Slimop Space, una startup que desarrolla telescopios orbitales para satélites y nanosatélites con el propósito de observar la Tierra desde el espacio y apoyar a industrias como la aeronáutica.
Su tecnología desarrolla generadores de imágenes de alta resolución ligeros, de bajo coste y entrega rápida, que pueden desplegarse rápidamente para satisfacer la creciente demanda aeroespacial.
En concreto, los telescopios modernos existen desde hace más de 350 años, cuenta Ferrer a Emprendedores, pero las necesidades humanas han cambiado por completo. “Vimos aquí un gap y una oportunidad de mercado que no podíamos dejar pasar”, señala.
Como dato cuenta que cada persona al día podría estar utilizando más de 100 satélites sin ser realmente consciente de ello. “Y va a ir a más”, apunta el empresario.
En este sentido, el espacio está prácticamente por conquistar y es ahí es donde residen los grandes retos de la actualidad. Además, “la tecnología necesaria es cada vez más barata y las barreras de estrada empiezan a eliminarse, lo que facilita la entrada de startups o empresas como la nuestra”, expresa.
Recibir el primer galardón de +50 Emprende, supuso todo un “impulso moral y mucho reconocimiento”, cuenta Ferrer. Ahora su objetivo es convertirse en un referente de la observación de la Tierra y poder salir al espacio a comienzos de 2027.
Segundo premio: SwiftOn
Delphine Hatsadourian es la CEO de SwiftOn, un proyecto que desarrolla un dispositivo inteligente capaz de reducir el consumo de agua durante la ducha, tanto en hoteles como en los hogares.
Mediante luces LED y una pantalla interactiva, esta herramienta propone al usuario una rutina de ducha optimizada, lúdica y sostenible. La idea surgió debido ante la escasez de agua en Cataluña y otras zonas de Europa, lo que les ayudo a “ver la urgencia y pasar a la acción”, destaca la galardonada a Emprendedores.
Para ella y su equipo ganar la segunda posición fue un impulso enorme. “Refuerza la confianza que una tiene en sí misma y en el proyecto; en nuestro caso nos dio muchísima visibilidad, credibilidad y motivación para seguir adelante”, explica Hatsadourian.
Desde entonces, asegura que han avanzado mucho: desarrollaron varios prototipos, realizaron demos y pruebas piloto en hoteles de Barcelona y otras ciudades, reforzaron la gestión de los datos de la herramienta y tuvieron ofertas de clientes de otros países.
A medio plazo, su objetivo es homologar el dispositivo y lanzar una primera serie para hoteles interesados. En el futuro, “soñamos con llevar SwiftON a los hogares, e incluso desarrollar versiones educativas para niños y adolescentes”, sostiene.
Tercer premio: Dekipling
Rodrigo García es el CEO de Dekipling, una startup que busca atender a las personas con demencia progresiva a domicilio. Su propuesta se basa en una metodología que han llamado ‘Mitiga’, en colaboración con el hospital madrileño de La Paz.
El objetivo de esta iniciativa es la prevención de eventos médicos en estos paciente ya sea debido a caídas, desajustes en la medicación, ingresos hospitalarios o fatiga del cuidador,
En particular, el desempeño de García en el negocio tiene un motivo personal como consecuencia de vivir el Alzheimer en su familia. “Después de haber pasado por este proceso, te das cuenta de que hay muchas cosas que no están bien resueltas”, destaca el empresario.
Entre ellas, cree que todavía es necesaria más formación sobre el deterioro cognitivo y un seguimiento más precioso. “Existe esa sensación de que no se puede hacer nada y que lo único que podemos hacer es acompañarlos en el proceso”, señala.
Sin embargo, mediante algoritmos existe la posibilidad de ofrecer información al cuidador principal sobre el estado general del paciente y crear un plan de vida activo para ralentizar el avance de la enfermedad.
En la actualidad, su equipo se encuentra en fase de validación clínica en La Paz, aunque su misión a largo plazo es la aprobación sociosanitaria en municipios y comunidades autónomas.
“Hay 50.00 familias que reciben ayuda de la Comunidad de Madrid, pero no se sabe qué pasa ahí, no hay un control sobre el cuidado de las personas con deterioro cognitivo”, asegura. “Nosotros creemos que podemos ayudar a las familias y ahorrarle mucho dinero al sistema sanitario de la Comunidad de Madrid y de España”, concluye.
Premio Emprendimiento Verde: Agrolinera
Juan Gutiérrez es el CTO y Cofundador de Agrolinera, un negocio que tecnifica el campo y sus actividades en ganaderías, queserías, gestores de residuos e industrias lácticas para acelerar la transición ecológica en estos entornos.
Entre sus iniciativas actuales, digitalizan y trazan la recogida de residuos en empresas ganaderas, con el fin de evitar su almacenamiento en fosas y así emitir menos cantidades de metano a la atmósfera. Por medio de su trabajo, monitorizan las rutas de recogida de los purines, controlan la calidad del residuo y resuelven su gestión.
“Es relevante que la gente entienda que la tecnología en zonas rurales, donde tradicionalmente no se ha tenido acceso a ella, posee el potencial de transformar la economía y la sociedad”, cuenta Gutiérrez.
Como propósito de futuro pretenden expandir su propuesta desde Asturias a otras zonas que, por razones orográficas conviven con estas mismas problemáticas, como Galicia, Suiza o Picos de Europa. “Buscamos lugares donde podamos impactar realmente en la vida de la gente”, concluye.
Estos galardones contaron con una dotación económica de 10.000 euros para el primer premio, 5.000 euros para el segundo y 3.000 euros para el tercero. Asimismo, el proyecto galardonado del Premio Emprendimiento Verde recibió 15.000 euros. Entre otros, los vencedores de la categoría general recibieron 20.000 euros en formación y asesoramiento.