La inteligencia artificial, la computación cuántica, el sector espacial, la fotónica o los semiconductores han dejado de ser tecnologías desconocidas. Todas ellas son tecnologías complejas, pero que han irrumpido todos los escenarios por su potencial transformador y solucionador de retos sociales, y por su capacidad de generar ocupación de calidad.
Todo ello ya ha impactado en la aceleración de la transición energética, el uso eficiente de recursos como el agua, la reducción de las emisiones causantes del cambio climática o el envejecimiento saludable de la población.
El reto de las startups deep tech
Solo en Cataluña, existen 340 startups deep tech que emplean a 2.735 personas y facturan 166 millones de euros anuales, según los datos más recientes de Acció. La biotecnología (37%), la IA (28%), los materiales sostenibles y de frontera (11%), las baterías y la energía limpia (6%) y la robótica (6%) son los sectores que lideran el top 5 entre estas empresas.
El gran reto de las startups deep tech es que requieren un recorrido a largo plazo debido a su base científica o tecnológica y una financiación de capital riesgo estable durante todo el proceso.
La ciudad que apoya el deep tech
Barcelona se ha posicionado como el primer hub del sur de Europa en capital captado por empresas deep tech, con 544 millones de euros entre 2019 y 2024, por delante de Copenhague, Madrid y Ámsterdam. Un 78% de las startups han obtenido financiación de capital riesgo y, de estas, un 40% ha superado el millón de euros en una ronda.
Otro elemento clave del deep tech es su impacto en los que ya se han definido como sectores estratégicos para las ciudades, como la economía digital, la salud o la industria 4.0. Por ello, las administraciones públicas están lanzando nuevas iniciativas capaces de acompañar estas startups.
El Ayuntamiento de Barcelona, a través de Barcelona Activa, cuenta con el Mentor in Residence, un programa para apoyar el emprendimiento con 72 horas de consultoría por parte de mentores expertos durante 6 meses.
Asesoramiento que impulsa negocios
Electraqua, centrada en el desarrollo de soluciones electroquímicas para el tratamiento avanzado de aguas residuales, es una de las empresas participantes en este programa. “Hemos mejorado el deck, complementando la visión de negocio con aspectos atractivos para los inversores”, apunta su CEO, María Fernanda Murrieta: “el asesoramiento por expertos en financiación ha sido importante en la búsqueda de financiación pública y privada”.
Precisamente, la mentoría es el valor añadido que Murrieta destaca de estas iniciativas, ya que “aporta otra visión sobre la tecnología y el camino a seguir hacia la transferencia al mercado”.
Barcelona Activa cuenta con más de 35 años de trayectoria ofreciendo incubación, formación, asesoramiento individualizado y servicios sectoriales en proyectos como Electraqua. “Es fundamental poder validar el producto y la necesidad real de los futuros usuarios. Por muy buena que sea la tecnología, si no existe una necesidad concreta ni potenciales clientes, será muy difícil entrar en el mercado y atraer financiación”, destaca.
La compañía inició su andadura con un programa de preaceleración y asesoramiento en todo el proceso, y hoy ya es parte del deep tech que puede convertir Barcelona en un referente.
En el último trimestre del 2025 se abrirá una convocatoria de Mentor in Residence para acompañar 10 proyectos nuevos y 10 startups.