En menos de una década, SEAT ha pasado de los números rojos a unos más que boyantes números negros, con resultados positivos por segundo año consecutivo y un beneficio neto el pasado ejercicio de 281 millones de euros, un 21% más que en el ejercicio anterior. Pero esto es solo la consolidación de una tendencia que ha impulsado a SEAT en una senda de crecimiento constante durante los últimos cinco años.
En 2017 alcanzaron los 470.000 vehículos vendidos, un 14,6% más que en 2016, lo que supone el mejor resultado desde 2001. Pero es que, si ampliamos más el arco, el incremento es todavía más impactante, ya que entre 2012 y 2017 las ventas de la compañía crecieron un 45,6%. Además, como recuerda Luca de Meo, presidente de SEAT, en el Informe Anual correspondiente a 2017, “ha logrado récords históricos de ventas en muchos de sus mercados principales, como Alemania o el Reino Unido, lo que nos ha situado como una de las marcas de automóviles que más crece en Europa con incrementos que llegan a los dos dígitos (…) Un cambio que nos permite garantizar que SEAT se encuentra en otra dimensión, tanto en el conjunto del mercado como dentro del Grupo Volkswagen”.
Una ofensiva que arrancó en 2016
En estos espectaculares resultados ha jugado un papel fundamental la ofensiva de producto más importante de la historia de la compañía, que arrancó en 2016 con el lanzamiento del Ateca, tuvo su continuidad en 2017 con la renovación del León, el lanzamiento de la quinta generación del Ibiza y el estreno del Arona, se mantiene en este 2018 con los próximos lanzamientos de Tarraco y de la marca CUPRA y continuará con un lanzamiento de un modelo cada seis meses de aquí hasta el año 2020.
Los lanzamientos de 2016 y 2017 “permitieron elevar la producción y repercutieron de forma directa en la creación de empleo, generando entre 2015 y 2017 hasta 500 nuevos puestos de trabajo en nuestras instalaciones”, concluye de Meo. Con los nuevos lanzamientos, la compañía ha desarrollado un portfolio que da respuesta a las necesidades de todos sus clientes, adaptándose con acierto a las nuevas tendencias del mercado, desarrollando modelos en segmentos en crecimiento y priorizando la satisfacción del cliente.
Los ingresos por ventas alcanzaron en 2017 un récord llegando a casi 10.000 millones de euros, un 11% más que las conseguidas en 2016, en gran medida por la buena acogida que han tenido en el mercado el nuevo Ibiza, el Arona y la consolidación del Ateca. Gracias a esta gran ofensiva, la cobertura del total del mercado de SEAT ha alcanzado el 75%.