Los cálculos son que uno de cada dos hombres y una de cada tres mujeres sufrirán cáncer a lo largo de su vida. La buena noticia es que tiende a cronificarse la enfermedad y que el porcentaje de supervivencia aumenta.
A ello quiere contribuir Xenopat (http://xenopat.com/es), una empresa que pone los últimos avances científicos al servicio de la lucha contra el cáncer. “Hemos detectado dos debilidades –señala Ana Portella, CEO de Xenopat–. La primera, que los fármacos sólo llegan al 5% de los pacientes, la tasa de éxito más baja de toda la industria farmacéutica. La segunda es que los oncólogos no tienen evidencias de cuál es el mejor fármaco para cada paciente”.
Las investigaciones realizadas durante más de 10 años en Xenopat –spin-off del Instituto Catalán de Oncología–, del Instituto de Investigación Biomédica de Bellvitge y del Hospital Universitario de Bellvitge (HUB) se han encaminado a paliar las dos carencias referidas.
Así, ofrecen servicios cuya gran utilidad recae en la capacidad de obtener tratamientos oncológicos personalizados y anticipar la respuesta del paciente. Soluciones que repercuten tanto en beneficio de los enfermos, como en los costes médicos por la eficacia de los tratamientos.
