El propósito principal de Ron Santa Teresa hoy es ser herramienta útil de transformación y una fuente de inspiración. Transformación que, ante los retos, saca lo mejor de su gente. Inspiración que se comparte y celebra en cada botella.
Los rones de Santa Teresa ostentan con orgullo en sus etiquetas el sello de la Denominación de Origen Controlado “Ron de Venezuela”. Esa denominación fue iniciativa de Santa Teresa, que la fomentó entre la congregación de fabricantes de ron del país, para agrupar a todas las marcas bajo un mismo certificado de calidad, a modo de resellar el prestigio mundial del ron venezolano.
Creado para celebrar los primeros 200 años de la Hacienda Santa Teresa, el Ron Santa Teresa 1796, es la insignia de la casa. Santa Teresa 1796 es un ron que nace de años transformación de las adversidades en oportunidades en Venezuela. Con las peores circunstancias posibles, Santa Teresa fue pionera en desarrollar un complejo proceso de producción, utilizando el antiguo método español de la solera para producir un Ron que con acabado sorprendentemente rico, refinado y seco.
Este ron súper premium debe su extraordinario cuerpo y sabor a delicado proceso de fabricación que combina la destilación mediante procesos continuos y artesanales, el añejamiento mediante al antiguo método de solera -tradicionalmente reservado para la producción de brandy y jerez-, y al especialísimo trabajo de hombres y mujeres de Revenga que por generaciones han participado en la producción del ron.
De la moderna destilería se obtienen alcoholes ligeros y pesados, que junto a los obtenidos de la destilería artesanal o Pot still, son envejecidos pacientemente para formar el blend de hasta 35 años de añejamiento que irán al proceso de Solera para unirse al Ron Madre, una mezcla creada en 1992 para dar el toque final a este extraordinario producto. Finalmente el reposo en toneles le confiese la suavidad y redondez que le caracteriza.
El Proceso de Solera, que consiste en la crianza en barricas, el trasiego en cascada y la posterior crianza en toneles, se produce en el llamado Criadero de Solera y puede resumirse en tres etapas:
Relleno de la Solera: En el Criadero de Solera las barricas de roble están dispuestas en cuatro hileras verticales, una colocada sobre la otra, para la crianza en barriles. Esta fase del proceso comienza cuando la barrica superior se rellena con una mezcla de tres tipos de ron: rones ligeros, rones pesados y rones especiales, producidos a partir de los alcoholes de nuestra destilería Batch o Pot still. El resultado es una mezcla compleja de rones de 4 a 35 años de edad, combinados a través del proceso de Solera.
Crianza en barrica: Cada nivel de la solera contiene rones por escala de madurez. La hilera que está más cerca del piso contiene los rones más añejos, que serán embotellados. Los barriles en la hilera superior de la pila se rellenan con el ron madre más joven, también llamado “mezcla inicial”.
Cuando se extrae ron de una de las barricas cercanas al piso, esta se carga con ron del barril ordenado justo sobre ella. El ron envejecido se trasiega lentamente en cascada desde una fila de barriles a la otra, hasta alcanzar la madurez plena en las barricas más cercanas al suelo. Justo de allí proviene el nombre del proceso de «Solera»
Crianza en Tonel: La porción de la mezcla extraída de las barricas inferiores pasa por un proceso adicional llamado “crianza de toneles», alusivo a los grandes toneles de roble donde reposa por un tiempo esta fusión de rones, lo que le confiere a Santa Teresa 1796® su cuerpo maduro y balanceado, que se asocia a la redondez del perfecto añejamiento y lo convierte en un ron inconfundible e inimitable.
Distribución
A partir de la firma de una Alianza de distribución internacional en diciembre de 2016, los productos de Ron Santa Teresa son distribuidos por Bacardí https://www.bacardi.com/es/es/, líder en el mercado de rones en el mundo. Su red de distribución alcanza más de 150 países e incluye el canal de global travel retail. No obstante, en el mercado venezolano Ron Santa Teresa se sigue sirviendo directamente las ventas a sus clientes y aliados.

La Hacienda
La Hacienda Santa Teresa es actualmente el hogar de un moderno complejo agroindustrial, turístico y deportivo donde no sólo se elabora el mejor ron de Venezuela sino que también se trata de un espacio donde se transforma la vida de decenas de personas a través de sus iniciativas sociales.
Anualmente, la hacienda recibe más de 100 mil visitantes que tienen la oportunidad de conocer de cerca su historia y el proceso de producción del ron, además de los eventos que apoyan la gestión de la Fundación Santa Teresa.
La Bodega Santa Teresa, fruto de la intervención arquitectónica de la primera planta de envasado de Ron Santa Teresa, es un hermoso escenario que se convierte en centro de eventos, reuniones corporativas y celebraciones. Es allí, en esa misma instalación, donde se encuentra ubicada la Bodega Privada que preserva las barricas donde se añeja el ron más exclusivo de la casa Santa Teresa.

Un poco de historia
Santa Teresa 1796 es un ron que nace de 225 años de transformación de las adversidades en oportunidades en Venezuela. En 1796 el Conde Tovar funda en los Valles de Aragua la Hacienda Santa Teresa y decide, a partir de la caña de azúcar y con un alambique artesanal, destilar aguardiente para compartirlo con los amigos que le visitaban.
Se trata de un proceso de producción complejo, sofisticado y único. En la Hacienda Santa Teresa, el proceso de producción artesanal incluye muchos pasos, pero nunca ni atajos ni químicos añadidos. Así, son pioneros en el uso del tradicional método de solera para añejar Ron. Igualmente, todas las materias primas y la producción de Santa Teresa 1796 vienen y se realiza íntegramente en el Valle de Aragua, Venezuela, conocido por ser unas tierras fértiles y con condiciones climáticas idóneas para cultivar caña de azúcar y producir Ron.
Una marca con valores
Ya al margen de la calidad de sus rones, otra peculiaridad de Santa Teresa es el firme compromiso con la transformación de la comunidad local. El propósito que llevan años persiguiendo es generar un impacto positivo en su comunidad a través del Proyecto Alcatraz, un programa que ayuda a reconvertir a exmiembros de bandas criminales en artesanos y cuya historia peculiar ya tuvimos ocasión de hablar en este otro artículo de Emprendedores