De perder medio cultivo a casi no ver pulgón; la campaña que lo cambió todo

Durante años, el pulgón ha sido uno de los enemigos silenciosos del campo hortícola en España. Llega sin avisar, se instala rápido y, cuando se detecta, ya ha debilitado brotes y rendimiento. Muchos agricultores viven esa historia una y otra vez. Pero hay quienes han empezado a cambiar el guion. Uno de ellos es Antonio.
“El año pasado el pulgón me quitó medio cultivo. Este año, con Metarhizium robertsii NTC/FG/03 de Nostoc, apenas lo he visto.”
Así comienza el testimonio de Antonio, agricultor hortícola con más de dos décadas en el campo. Su resumen es directo y casi desarmante:
“Esta vez me adelanté al problema.”
En hortícolas, el pulgón es enemigo rápido y silencioso. Cuando se detecta, suele ser tarde. Antonio lo explica sin rodeos:
“Siempre actuaba cuando lo veía. Ahora la planta estaba fuerte antes de que llegara.”
¿Qué cambió?
Este agricultor incorporó un manejo preventivo con HTpro Flame, un biofertilizante desarrollado por Nostoc Biotech, formulado con Metarhizium robertsii – cepa NTC/FG/03-. No funciona como un insecticida tradicional, sino fortaleciendo la planta desde dentro.
Un ensayo independiente de Eurofins comparó cultivos con y sin esta estrategia preventiva y los resultados fueron contundentes:
– Menos hojas con pulgón
– Menor avance en toda la parcela
– Muchísima menos densidad de pulgones por punto observado
Antonio lo resume con una imagen clara:
“El pulgón vino, pero la planta ya tenía ‘la puerta cerrada’.”
¿Qué significa esto para un agricultor cualquiera?
Más estabilidad. Menos estrés. Y un cultivo que aguanta mejor cuando llega la presión.
En sus palabras:
“Trabajar así me dio tranquilidad. Ya no voy persiguiendo el problema… voy por delante.”
La reflexión final suena simple, pero cambia la manera de cultivar:
“Si esperas a ver el pulgón, ya llegas tarde. Si preparas la planta antes, todo funciona distinto.”
Historias como esta apuntan a una idea cada vez más compartida: el futuro del campo no está solo en reaccionar, sino en anticiparse. Y el testimonio de Antonio lo resume mejor que cualquier gráfico: cuando la planta llega fuerte, el pulgón llega tarde.

