¿Qué factores influyen en el ritmo de creación de empresas en un país? Una pregunta complicada para la que se suelen ofrecer múltiples respuestas.
El nuevo estudio de la OCDE Panorama del Emprendimiento 2011 intenta clarificar este tema. En él se recoge cómo la crisis ha ocasionado que en todos los países desarrollados cayera el ritmo de creación de empresas (en el gráfico). Sin embargo, en algunos (Francia o Australia), éste se ha recuperado, e incluso, ha superado el que tenía antes de la crisis (2006). Mientras que en otros, especialmente España y Dinamarca, se crean el 55% y el 77%, respectivamente, de empresas que se constituían en 2006.
Uno de los primeros factores a los que alude el informe es la facilidad de los emprendedores para lograr financiación. Y destaca el caso de Israel, en el que el capital riesgo aporta el 0,18% del PIB a la financiación de nuevas empresas. También Estados Unidos, Suecia o Finlandia muestran un alto nivel de apoyo financiero y, junto a Israel, son los campeones del emprendimiento.
Pero no es solo el dinero lo que parece fomentar la creación de empresas. También una imagen favorable del emprendedor en la sociedad parece pesar, y en Estados Unidos y los países nórdicos el 70% de la población la tiene.
Algo más que papeleo
Frente a este panorama, en algunos países se ha avanzado en simplificar el proceso de constitución de una empresa (como en España). Pero este informe, y otros muchos, revelan como no basta con ello.
Hace falta una cultura emprendedora: espíritu emprendedor en los jóvenes, en la educación, en los inversores privados,… en la sociedad en general, para que se produzca el cambio.