White Mirror: el futuro es brillante y esperanzador para las empresas con propósito
Este evento ha puesto en valor la capacidad del ser humano para canalizar la IA en sus negocios y contribuir a la sociedad. Conoce la visión más humanista de esta herramienta con nuestros ponentes.

Sngular organizó ayer una jornada en la que quiso vislumbrar el devenir tecnológico y empresarial del futuro. Mediante tres mesas redondas, los ponentes buscaron combatir las incertidumbres de la era de la inteligencia artificial.
El CEO y director de Revista Emprendedores, Alejandro Vesga, dio la bienvenida a los visitantes y expresó que esta jornada iba mucho más allá de reunir a los principales actores del ecosistema tecnológico.
El propósito de este evento era “construir el futuro que nosotros queremos“, enfatizó el líder de la publicación.
De hecho, esta iniciativa nació con la intención de convertirse en un laboratorio de ideas. En él, se querían volcar las preocupaciones del sector y construir una comunidad White Mirror a favor de las nuevas herramientas tecnológicas.
Construir un futuro optimista
Después de la presentación, Vesga introdujo al presidente ejecutivo de Sngular, José Luis Vallejo.
En su intervención, el líder de la tecnológica expresó que todo el ecosistema se encontraba en un momento de mucha incertidumbre.
Y enfatizó en que hay gente que lo asume con resignación, y que otros como él se consideraban muy afortunados por experimentar tales cambios.
También, habló del nombre que recibía este evento en oposición a la serie distópica Black Mirror. En ella, la tecnología siempre acababa superando al ser humano de alguna forma.

Para Vallejo, estas herramientas nos ayudan a ser más humanos. En su opinión, no existe ética en ellas y son un mero instrumento. Lo importante es la perspectiva que se adopte.
“Las personas dudamos, cambiamos de opinión y nos dejamos influenciar“, añadió el presidente. “Debemos unirnos y darnos un empujón para conseguir un futuro más optimista“, expresó.
Para concluir, Vallejo contó la razón por la que se decidieron a organizar este evento. Buscaban contribuir a que el sector trascendiera y a se hiciera preguntas que ayudaran a la sociedad.
Tras él, Vesga retomó la palabra y dio paso a la primera mesa redonda.
La sociedad de los próximos años
La primera mesa redonda fue dirigida por el director de Cultura y Entretenimiento en Sngular, Fernando Rada.
Los ponentes fueron la presidenta de BeUp, Pilar Jericó; la directora de Prodigioso Volcán, Carolina Miyata, y el CBTO especialista en biomedicina de Life Length, Enrique Samper.
En un primer momento, el debate se orientó hacia la salud. Y aquí Samper destacó que estamos en un contexto en el que la vejez se alarga gracias a la innovación tecnológica.
De acuerdo con él, Miyata expresó que deberíamos tener un papel más activo en este campo, así como eliminar los prejuicios existentes sobre la innovación.
Por su parte, Jericó dijo que la tecnología podría mejorar el mundo interior de las personas. En su opinión, la vida podría ser larga y duradera a nivel biológico pero en ella también debe haber espacio para el propósito.
Tras la ponente, Rada preguntó sobre la necesidad de conexión en una sociedad muy polarizada. Y Miyata le respondió que el miedo se relaciona con el aislamiento y el odio hacia “el otro”.
La directiva opinó que la tecnología podría ayudarnos a mejorar en esta cuestión. “Tal vez, sean estos grandes retos los que al final nos unan”, comentó.
Combatir el miedo
Asimismo, la ponente recomendó estar cómodos en la incomodidad y respetar las opiniones ajenas.
“El profesional del futuro será aquel que conviva mejor con las ideas diferentes”, advirtió. De acuerdo con ella, Jérico dijo que el miedo era “miope” y que dentro de las empresas hay que combatirlo con humanismo. Eso significa dar a los trabajadores seguridad psicológica y la oportunidad de aprender, contribuir y llevar la contraria, según argumentó.

El debate concluyó con una pregunta sobre las claves para conseguir ese futuro optimista. Miyata llamó a la colaboración activa entre las organizaciones. Jérico expresó que deberíamos convertirnos en los dueños de nuestro destino y rodearnos de personas inspiradoras.
Por último, Samper, dijo que habría que poner el bienestar en el centro. “Tenemos que convertirnos en los CEO de nuestra salud“, concluyó.
La metamorfosis de la empresa
La segunda mesa redonda fue dirigida por la directora de comunicación interna de Sngular, Ángeles García.
Los ponentes de este debate fueron la asesora en marketing mix modeling, Macarena Estévez, el director de país de Google Cloud, Isaac Hernández y, finalmente, el director de Randstad Research, Valentín Bote.
La moderadora les preguntó cómo serían las empresas dentro de diez años. Y Bote respondió que probablemente mejores.
El ejecutivo argumentó que a lo largo de la Historia se habían dado varias revoluciones tecnológicas y que la sociedad siempre ha salido beneficiada de ellas. No obstante, advirtió que vivimos una época en la que el reto principal es la velocidad de adaptación.
De acuerdo con él, Estévez expresó que seguramente se den cambios, pero que a diez años las empresas serán muy parecidas a las de hoy.
Por su parte, Hernández opinó que las organizaciones serán más líquidas y adaptables. Se desarrollarán en un tablero híbrido entre humanos y máquinas, y se verán obligadas a “hiperpersonalizar” sus productos.
Empresas con visión social
“Yo creo que la sociedad que queremos necesita este tipo de empresas”, dijo en relación a la sostenibilidad y el propósito. “Esas organizaciones serán las que sobrevivan porque serán las que capten una mayor fuerza de talento”.

Con respecto a la fuerza de trabajo, Bote habló de que los profesionales se están diversificando y asumiendo más tareas. De acuerdo con él, Hernández explicó que se ha dado un cambio moral en los jóvenes y ahora buscan “buenos” negocios en los que contribuir.
Finalmente, Estévez comentó que esperaba ver un mundo donde los mayores y los jóvenes pudieran ayudarse mutuamente. “Creo que uno de los grandes retos será este”, señaló.
“El desafío de unirnos a favor de la convivencia, de ayudarnos los unos a los otros y de llegar más lejos juntos“, concluyó.
Para terminar, Los ponentes hablaron de hard skills y soft skills. Aquí Bote opinó que el profesional del futuro tendría que gozar de ambas habilidades, especialmente de la segunda.
“Nos interesa cada vez más que la gente haga cosas diferentes, sea flexible y pueda transformar su actividad“, enfatizó.
No tener miedo a las innovaciones
Después de la última mesa, habló el asesor sénior para la innovación y la transformación digital en IE University, Enrique Dans.
En su monólogo el académico expresó que era un gran aficionado de la ciencia ficción porque las distopías nos ayudaban a pensar como sociedad.
Consideró que con la Inteligencia Artificial, pasará lo mismo que con la televisión, los walkman o los teléfonos móviles. Es decir, será demonizada hasta que la superemos y la veamos como una herramienta más.
“El miedo es enormemente potente y muy poderoso, pero termina ampliando nuestras posibilidades“, expresó. “El progreso no siempre es lineal pero su dirección siempre apunta hacia la luz“.

En este sentido la maquina nos complementará como especie. El académico señaló que no ha llegado para arrebatarnos lo que somos, sino para ayudarnos a descubrirlo.
“La IA nos permite centrarnos en lo que verdaderamente somos únicos: en crear e imaginar”, enfatizó.
Asimismo, nos ayudará a conectarnos lingüísticamente entre nosotros. Podremos crear sistemas políticos más justos y a tener una mejor vejez. “Ahora es el momento de elegir que futuro queremos mirar“, concluyó.
Vesga dio por terminado el evento y reveló los datos de la encuesta que hizo tras finalizar la segunda mesa redonda.
Los temas que más preocuparon a los empresarios durante la jornada fueron la ética y el humanismo (31%), la biotecnología (24%), la IA (17%), el impacto social (16%) y la sostenibilidad (11%).
