En una parte estaba el mercado chino, el más grande del mundo e incapaz de autoabastecerse. En la otra, los productores agroalimentarios de fuera que sí conocen la necesidad china, pero que no saben cómo adentrarse en un mercado que, a priori, resulta bastante opaco.
La prueba es que solo el 7% de las empresas exportadoras de España se atreven a comercializar sus productos en China. Y mientras que unos necesitaban comprar y los otros vender, no había nada que solucionase esta especie de ‘teléfono estropeado’ y facilitara la conexión.
Así vieron el problema Iago Sanmartín Mantiñán y Sebastián Wornham Masi antes de decidirse a crear Monkey Markets. Se trata de un software inicialmente orientado a los productores agroalimentarios y de bebidas que democratiza la entrada a vender en el mercado chino. La solución digitaliza el proceso completo de exportación integrando hasta un 80% de las tareas que realiza habitualmente un export manager.
Y aunque el manejo de la herramienta resulte sencilla y muy intuitiva para el usuario, lo cierto es que corresponde al resultado de más de dos años de desarrollo, meses de investigación del mercado asiático y más de seis años de experiencia de estos emprendedores en el comercio internacional, y eso que aún no han cumplido los 30 años.
El proceso, paso a paso
Monkey Markets opera en cinco pasos automatizados que representan el proceso estándar de exportación a China. A través de ellos, te van conduciendo desde un análisis previo pormenorizado de mercado, hasta la identificación de la mejor zona del país para introducir tus productos, los requisitos que se exigen para hacerlo o las vías para cerrar operaciones de venta.
Siguiendo todo el proceso, el productor podrá conocer sin necesidad de moverse del sofá de su casa aspectos como: ¿cuál es la demanda del producto que quiere vender en cada una de las numerosas provincias chinas?, datos de importadores y sus contactos, empresas de la competencia que ya operan en ese mercado con un producto similar, la evolución de la demanda, el ticket medio, cómo posicionar un producto… Toda la información que ofrecen en esta ingente base de datos se actualiza semanalmente, salvo la que depende de los organismos oficiales, como Aduanas.
Ya en el supuesto de que te hayas convencido de que tu producto tiene encaje en el mercado chino, la plataforma digital permite darse de alta como exportador, registrar la marca, adaptar el packaging o tramitar certificados, entre otras muchas gestiones.
Por si fuera poco, Monkey Markets incluye un apartado formativo donde ofrecen a los usuarios entrenamientos sobre materias específicas. Para ello, han creado una especie de Netflix interno con contenidos categorizados por temáticas que desarrollan expertos chinos y españoles o a través de entrevistas a exportadores e importadores que cuentan sus experiencias en vídeos de no más de 10 minutos de duración a modo de microlearning. Todo está traducido al español y al inglés.
La digitalización de la exportación agroalimentaria
“Hemos creado la plataforma más completa de comercio internacional con China que se ha hecho nunca. Le hemos dado otro enfoque al proceso de exportación tradicional y lo hemos digitalizado. Es la herramienta que nosotros hubiésemos necesitado para realizar nuestras funciones”, declaran los fundadores aludiendo a sus seis años de experiencia como intermediarios entre ambas partes, “primero ayudando a los fabricantes a vender en el mercado chino y, más tarde, cuando nos ganamos la confianza de los importadores y distribuidores chinos, ejercimos como su brazo de compra en Europa”.
El producto estará disponible en el mercado a finales de mayo. La comercialización será como un SaaS de suscripción anual repartido en tres módulos: Check, que es gratuito, y otros dos de pago que denominan Sell y Sell&Market.
La empresa, constituida en A Coruña, cuenta ya con un equipo de cinco personas y aunque la vocación es claramente global, prefieren esperar y operar solo en nuestro país hasta julio de 2022 al objeto de rodar el producto e implementarlo si es necesario antes de acometer la expansión internacional. En cuanto a la escalabilidad del proyecto, también está garantizada pudiendo crecer por una triple vía: la internacionalización, la incorporación de otros verticales de productos en la herramienta o la ampliación de mercados para exportar.
Crear un ecosistema que apoye a “un sector primario privilegiado”
El objetivo final, como dicen sus creadores, no es otro que facilitar la exportación al mercado chino a todos los fabricantes españoles de productos agroalimentarios y de bebidas “y no pararemos hasta conseguirlo”. Saben que hay oportunidad del negocio, no solo en lo que atañe a la exportación sino también dentro del sector primario en general, en su opinión algo infravalorado durante los últimos años.
“España siempre ha sido una potencia mundial en el sector agroalimentario y así debe continuar porque el potencial de negocio es bestial. Tenemos buenos productos, grandes profesionales y una infraestructura que nos hace muy competitivos. Falta creérnoslo y salir a vender fuera. Cuantas más iniciativas surjan y más organismos e instituciones apoyen a este sector, mejor, porque estamos convencidos de que España puede desempeñar un papel crucial en el futuro agroalimentario de Europa. Existen instituciones, como el Grupo Cooperativo Cajamar, que siempre han estado ahí, respaldando a los profesionales e impulsando la innovación sectorial, pero falta la suma de todos los agentes implicados para crear un ecosistema exportador que acompañe un sector primario tan privilegiado como el nuestro y que nos ayude a vender más y mejor. Solo así seguiremos creciendo porque la demanda es creciente. Nosotros, con Market Monkeys, hemos querido aportar nuestro granito de arena dando la capa digital que le faltaba a la exportación”, concluyen estos emprendedores.