Yuccs fabrica zapatillas con lana de oveja merina, la misma con la que La Mesta conquistó el mundo cuando España.
La puesta en marcha de Yuccs comenzó a fraguarse en la cabeza de Pablo Mas, fundador y CEO de la empresa, a principios de 2017. Por aquel entonces, trabajaba en la firma de calzado Camper, por lo que conocía el sector. Su idea era crear una marca de calzado cómodo, empleando un material innovador, natural y respetuoso con el medio ambiente. Además, quería producir en España. Encontró la respuesta en la lana merina. “Había una gran demanda de lana merina en el sector de la moda. Muchas marcas españolas la usaban en jerséis, chaquetas, etc. Era un material premium y que encajaba con nuestra premisa de innovación natural y comodidad. Además, permitía desarrollar todo en España, ya que había una importante industria de tejeduría, respondiendo a nuestro compromiso de producción local”, apunta Mas.
Se puso manos a la obra y contactó con el Instituto Tecnológico Textil (Aitex), desarrollando con ellos un tejido a partir de lana merina. El resultado es un material cómodo, de alta calidad, natural, sostenible y biodegradable. También es termorregulador y transpirable, por lo que sus zapatillas pueden calzarse tanto en invierno como en verano. Además, la lana merina cuenta con propiedades antibacterianas, así que pueden usarse incluso sin calcetines, sin provocar malos olores.
De la oveja a la tienda
Este material no se utilizaba para la confección de calzado, por lo que Yuccs no podía acudir al mercado a comprar tejidos para sus zapatillas. “Cogemos la lana y hacemos un producto que no existe. Cada vez que producimos el tejido, tardamos cuatro meses. No se puede pedir tejido al proveedor y que nos lo sirva mañana. Si nos quedamos sin stock, tenemos que esperar. Las grandes marcas de calzado compran los tejidos y pieles a proveedores, que tienen cartas de colores y materiales sobre los que escoger. Nosotros no tenemos eso”, detalla Mas.
Esta circunstancia condiciona su modelo de negocio. “Exige una planificación muy superior. Y también un mayor riesgo en cuanto al desarrollo y la producción. Por ejemplo, si fallamos a la hora de producir un tejido y obtenemos una cantidad menor, podremos producir menos zapatillas. Eso es algo que nos pasó al principio”, admite.
Los diseños salen de su ‘cuartel general’ en Palma. Después, la compañía trabaja codo con codo con más de una decena de proveedores de toda España para fabricar cada uno de los componentes de sus zapatillas. No sólo el tejido de lana, sino también las suelas, cordones o plantillas, desarrollados por la propia empresa. “Estos materiales no puede encontrarlos en el mercado ningún otro fabricante de calzado”, asegura el fundador. Finalmente, se ensamblan en una fábrica de Elche, con la que trabaja estrechamente. “Entienden el concepto de lo que hacemos y están muy implicados con la marca. Además, están muy integrados en el proceso productivo. Es una fábrica de tamaño mediano-grande y nos da capacidad para seguir creciendo de la mano de ellos en los próximos años”, declara.
Salirse del rebaño
En un sector tan saturado como el del calzado, Yuccs tiene muy claras sus ventajas competitivas. Por un lado, la diferenciación, ya que son las únicas zapatillas en el mercado confeccionadas con lana merina. Otra de sus fortalezas es la especialización. Actualmente, ofrece sólo un modelo, disponible en diferentes colores y en su versión para hombre o mujer. “Las firmas de calzado suelen sacar muchas colecciones, usando varios materiales y diseños. Como filosofía de marca, nosotros tenemos la idea de lanzar únicamente dos nuevos productos cada año”, explica Mas.
La empresa ha logrado que el cliente entienda la propuesta y perciba sus productos como algo único. Mas especifica que su principal target son personas de 30 a 65 años, dispuestas a pagar los 95 euros que cuestan sus snickers. Hasta el momento, ha sido capaz de colocar prácticamente toda su producción. De hecho, el pasado año sufrió varias roturas de stock. “Cerca de la mitad de las ventas se hicieron mediante reserva. Hubo gente que estuvo hasta tres meses en lista de espera para comprar nuestras zapatillas porque no teníamos. Ahora tenemos stock y vamos a intentar que las previsiones sean mejores”, comenta.
Yuccs apuesta decididamente por el ecommerce. El 95% de las ventas llegan a través de su tienda online. Y no vende en marketplaces ajenos, ya que quiere mantener el control sobre su marca. “Nos ayuda a controlar la comunicación, imagen de marca, precio, etc.”, especifica Mas. Además, hace hincapié en su bajo índice de devoluciones, que se sitúa en el 4%. “Es significativamente bajo para un ecommerce”, comenta. Cabe señalar que la compañía ofrece envío y devolución gratuitos.
Este afán de control de la marca se traslada al canal físico, que aporta el 5% restante de su facturación. Sus zapatillas se comercializan en algunas tiendas multimarca, pero sin intermediarios. “No trabajamos con distribuidores porque se pierde el control. Elegimos dónde vamos. Son tiendas exclusivas y bien seleccionadas, que encajan con nosotros por imagen, filosofía y los productos que ofrecen. Se trata de establecimientos conceptuales y minimalistas, donde se cuida el diseño y la exclusividad. Además, son tiendas únicas, no franquicias o meros distribuidores, donde podemos tener trato directo con los dueños”, explica. Tiene presencia en Palma -en tres establecimientos-, Valencia y Barcelona. Y quiere seguir creciendo en este canal, pero como complemento al online.
Además, este año abrirá en Madrid su primera tienda física propia. “Muchos se preguntarán cómo lanzamos una tienda sólo con tres productos. Pensarán que estamos locos. Pero vamos a presentar un concepto de tienda diferente, donde podremos explicar el desarrollo de los materiales y nuestra filosofía de marca, ofreciendo una experiencia de compra”, reseña Mas.
Salto a Alemania
Aunque la mayor parte de sus ventas se materializan en nuestro país, Yuccs tiene un ojo puesto en la exportación. Con sede en Palma, Yuccs conoce bien al cliente alemán, así que el pasado año abordó el mercado germano. Este salto fue posible gracias a una ronda de financiación suscrita por la familia Sakovics Matutes en la primavera del año pasado, en la que obtuvo 300.000 euros. “Cuando emprendemos en el canal online, pensamos que vamos a llegar a todo el mundo. Pero no es cierto. Hay que invertir en marketing para tener tráfico y respuesta. Estamos trabajando para mejorar a nivel logístico, operacional y de comunicación en Alemania, trasladando allí el modelo de España. Cada país tiene muchísimo mercado y no se trata sólo de estar en 20 países en 2 años. Queremos ir creciendo y viendo cómo responde cada mercado. Si todo va bien, algún día abriremos tienda propia en Alemania”, afirma el CEO.
Yuccs lanzó su primera colección -unos 1.000 pares de zapatillas- a finales de 2018. El año pasado fue su primer ejercicio completo, en el que vendió 10.000 pares y alcanzó unas ventas de un millón de euros. En este ejercicio espera fabricar entre 30.000 y 40.000 zapatillas, triplicando su facturación. “Principalmente, de la mano del ecommerce. Pero también abriéndonos a los canales wholesale y retail, que nos ayudarán a llegar a esa facturación”, declara el fundador. Además, la empresa seguirá potenciando su tienda online en Alemania, que echó a andar el pasado año.