Empezó muy joven: “Con 18 años tuve que dejar los estudios. Mi familia se dedicaba al textil y la crisis de 1988 nos hizo mucho daño. Entonces se me ocurrió crear una empresa de informática, ya que todo el mundo decía que era el futuro. Pero cuando entraron las grandes superficies en el mercado, la venta de ordenadores y redes dejó de ser rentable. Pensé en dar un paso más allá en el sector. Comprobé que las cadenas de televisión llevaban las cintas desde la sala de postproducción a la de emisión. Y vi la oportunidad de digitalizar y almacenar esos contenidos en discos duros”. Contactó con Manuel Escribano, que tenía una empresa de software para automatizar radios. “Le propuse la idea y desarrollamos la primera versión de VSN News. Tardamos dos años y sólo vendimos el producto a tres televisiones locales de Cataluña. Cuando ya estábamos por tirar la toalla, apareció Sony, con la que firmamos un acuerdo para la venta mundial de nuestro producto, bajo su firma. Tras dos años, los resultados no fueron los esperados y decidimos comercializarlo nosotros como VSN”. En 2004 la fortuna les sonrió: ganaron un proyecto de dos millones de dólares en México, que les abrió financieramente las puertas del mercado internacional.