Daniel Crognale y Adrian Amorín se conocieron trabajando como becarios en una la tienda online de muebles de un familiar. «A raíz de trabajar juntos, pensamos empezar algo por nuestra cuenta. Con la experiencia adquirida en la tienda de mi tío y nuestros estudios en marketing y comunicación, decidimos lanzarnos», cuenta Amorín. Buscaron un nicho de mercado muy reducido y se decidieron por el sector de los complementos para la cabeza, como sombreros, gorros y gorras. Más adelante ampliaron también a gafas de sol y relojes.
Empezaron en 2009, aunque no fue hasta el verano de 2012 que derett.com arrancó como tal. Dos cambios de nombre y problemas de copyright con su anterior dominio web les hizo perder posicionamiento, algo clave en Internet. Con todo, desde entonces han facturado 20.000 euros y esperan pasar de 100.000 para finales de año.
«El trabajo en la tienda online de mi tío (portobellostreet.es) no sólo nos dio experiencia. Cuando comenzamos el proyecto se involucraron como capital semilla en la inversión inicial con 10.000 euros» explica Amorín, que confiesa que también han actuado como una especie de incubadora reduciendo costes, hasta que han empezado a funcionar de forma independiente en 2013.
Una de las ventajas de este sector y de su forma de negocio, es que trabajan prácticamente sin stock, comprando el producto cuando ya lo han vendido. En el caso de las marcas más conocidas, explican, llegan a acuerdos cuando llegan a cierto volumen de ventas.