«Nos centramos específicamente en el social learning, una evolución del e-learning, y todos los cursos que se pueden encontrar en la plataforma tienen en común que las clases están enfocadas casos prácticos y colaborativos. Los estudiantes deberán crear un proyecto que demuestre lo que han aprendido. Además del material necesario provisto por el profesor, disponen de un chat para hablar no sólo con él, si no para interactuar entre ellos y valorar otros proyectos fomentando el aprendizaje colaborativo», explica Asier Pereda, cofundador del portal Skillzity.
El planteamiento de esta plataforma es que cualquier persona con conocimientos pueda impartirlos utilizando Skillzity como canal, por lo que ellos sólo actúan como intermediarios. No tienen una temática predilecta ni todo va enfocado a un mismo sector, aunque según cuentan ellos, el uso va ligado a las competencias que se demandan. En este caso observan un mayor interés en las clases sobre comunicación, marketing, fotografía o diseño, aunque se pueden encontrar desde cocina hasta de origami.
Otra de las innovaciones que plantea esta startup creada por Pereda y Javier Badell es que también permite anunciar cursos presenciales, de forma que no se limitan exclusivamente al entorno de la formación online. No existen precios fijos para los cursos, por lo que cada profesor cobra lo que estime oportuno. «Hay desde cursos gratuitos hasta otros de 100 euros, aunque nuestro objetivo es posicionarnos como una empresa de formación low cost«, afirma Pereda. Su modelo se basa en una comisión del 15% por cada alumno inscrito, así que el coste para los que quieran impartir alguna enseñanza es a priori gratuito.
De momento su público se encuentra en los países de habla hispana y portuguesa, y ya ofrecen cursos en ambos idiomas. En una segunda fase del proyecto pretenden abarcar países árabes, empezando por Bharéin, Catar y Emiratos Árabes.