Frente a un mercado laboral seco de ofertas de trabajo, Paco Palau decidió buscarse la vida. “Cuando finalicé mis estudios de magisterio, no había trabajo. Y con el apoyo de mis padres, con más de 30 años de experiencia en la distribución de frutas y verduras (tenemos dos fruterías en Cullera, Valencia), puse en marcha Naranjas Palau para dar salida a los productos que cultivamos, sin tener que pasar previamente por intermediarios y grandes superficies”.
Palau, que ha invertido unos 9.000 euros, conoce los procesos por los que pasan los alimentos agrícolas (almacenes, cámaras frigoríficas, productos químicos de abrillantado, mercados mayoristas, etc.). “En nuestro caso, cosechamos las naranjas a las 15 h. y, al día siguiente, a las 10 h., ya las tienen los clientes en sus casas. Al igual pasa con las frutas y verduras que cultivamos (sandías, melones, calabazas, judías, tomates, pimientos, cebollas, patatas, pepinos, berenjenas…).
No nos interesa vender naranjas durante todo el año, como hacen otros. En julio y agosto no hay naranjas en los árboles. Sólo vendemos productos de temporada y de cosecha propia, y esa es nuestra garantía de sabor y frescura”, sostiene Palau, que se define como un agricultor que busca un mercado justo para sus productos y que usa las redes sociales para darse a conocer.