Que hablen de tí en redes sociales y te recomienden a sus amigos. Así dicho parece muy fácil, pero para eso tienes que ser una marca de renombre y estar muy presente en Internet. ¿Cómo lo puedes conseguir si en cambio eres una tienda de ropa, una peluquería o un restaurante? Con la herramienta Social Codes, una idea desarrollada por los hermanos Guillermo y Álvaro Peña basada en descuentos y en marketing a través de códigos QR. ‘Ya estamos con los dichosos códigos QR’, estarás pensando. Es cierto que es dificil encontrarles una aplicación verdaderamente útil para los negocios, pero en este caso han sabido aprovechar esta tecnología.
El funcionamiento es simple. Un negocio ofrece un descuento en su tienda para un producto concreto. Cualquier cliente puede acceder a esa oferta, pero haciendo algo a cambio. Leer un código QR que la tienda tendrá allí físicamente y hacer una acción en su muro de Facebook. «Se trata de un intercambio en el que las dos partes salen ganando. El usuario accede a un descuento o participa en un sorteo y el comercio da valor a sus promociones consiguiendo publicidad a cambio», explica Guillermo. De momento funciona con esta red social, aunque pronto pretenden entrar en otras.
Los dos hermanos crearon una agencia de marketing digital, y por diferentes proyectos que llevaron a cabo habían observado la separación que hay entre el mundo online y offline. Con la penetración en el mercado de los smartphones vieron la posibilidad de unir ambos mundos con su idea. Lo comentaron con un amigo informático y decidieron desarrollarlo. En ese punto se encontraron con el clásico problema del emprendedor: la financiación. Por eso recurrieron a su grupo de amigos y les propusieron invertir entre todos en la idea. De ese modo y con un crowdfunding particular, reunieron 60.000 euros para poner en marcha la idea en verano de 2013.
Una de las ventajas que juegan a su favor es que los usuarios que quieran disfrutar de los descuentos que ofrecen los negocios no necesitan descargar ninguna aplicación específica para ello, lo único que necesitan es un lector de códigos QR. Su modelo de negocio consiste en cobrar a sus clientes -los negocios- una cuota de 24,90 euros al mes por darse de alta en la herramienta y realizar una campaña, que pueden modificar las veces que quieran, y es váido para empresas que cuenten con puntos de venta físiscos u online. Al final la clave de su éxito reside en que los clientes serán los que harán publicidad en redes. Y es que, como dice Guillermo, «¿en qué confías más, en la publicidad o en la recomendación de un amigo?».