Lupe Rodríguez Santizo venía desarrollando su carrera profesional en el mundo editorial. Se libró del primer ERE pero intuyó que le sería imposible sortear el segundo de manera que, antes de que le comunicaran el despido, ya había abierto un perfil profesional en facebook como pequeño sondeo de aceptación a su idea emprendedora: vender libros acompañados de tartas artesanales. Eso es lo que hace Lupita´s cakes and books.
La idea la tenía pero reconoce que no hizo estudio de mercado y que el plan de negocio era modesto lo que le ha obligado a ir calibrando sobre la marcha hasta ajustar la oferta a sus capacidades. Empezó trabajando con una distribuidora pero “las cosas eran muy complicadas porque la distribución editorial española funciona muy mal”, argumenta. Así que optó con concretar y cerrar la oferta discriminando editoriales y quedándose sólo con dos: Impedimenta, en la literatura para adultos, y Ekaré para los libros infantiles. De cada una de ellas ofrece los diez títulos más vendidos que son los que inspiran la creatividad y la elaboración de la tarta que les acompaña en un original regalo. Ofrece también la posibilidad de que sea el cliente quien elija un libro y tarta determinados.
Elaboración artesanal
Es la misma Lupe Rodríguez quien obra la tarta en su domicilio particular que hace también las veces de oficina y almacén. Y si esta antropóloga de formación cuidó mucho la selección de los títulos de los libros, mayor esmero pone en las tartas en cuya elaboración emplea más de una hora y rechaza la inclusión de sucedáneos en los ingredientes “porque aunque hablemos de repostería, me interesa la comida saludable”, dice.
Tartas instructivas
Trabaja por encargo y el precio –una media de entre 30 y 50€- incluye la entrega a domicilio con la tarta en perfecto estado. En la web puede consultarse la sinopsis de cada libro y el tipo de tarta que le corresponde que puede estar hecha al estilo del país del autor o incluir los colores que describe el cuento.
Por el momento la demanda para adultos supera a la clientela infantil y son más mujeres que hombres. A ellas les hace un guiño con “La merienda del señor verde” cuya tarta es del mismo color y está hecha a base de espinacas que los niños devoran encantados.
Es pronto para saber si la empresa funcionará porque apenas hace dos meses que Lupe tiene disponible la web para recibir encargos pero si se puede decir que el negocio parece al menos apetecible.