Antes de lanzar el negocio, hicimos un estudio de competencia, un dimensionamiento del mercado y un ejercicio de benchmark internacional para saber: ¿hay alguien haciendo esto en España?, ¿hay casos de éxito de este modelo de negocio en otros mercados?, ¿el tamaño del mercado doméstico al que queremos dirigirnos es suficiente para sostener el crecimiento de la empresa los primeros años y cimentar una expansión internacional?, ¿hay otros players extranjeros que puedan entrar en el mercado español? Las respuestas fueron satisfactorias”, recuerda Emilio Capela, que junto a su novia Pilar de Arriba, han puesto en marcha Lord Wilmore.
Uno de sus grandes retos fue encontrar un laboratorio proveedor de lentes oftálmicas y otro de monturas que les suministrara pequeñas cantidades de modelos. Tras muchas visitas, cerraron los acuerdos de colaboración.
Prueba y compra
Un gran inconveniente sería ¿cómo se prueban las gafas los futuros clientes? “Por eso decidimos desarrollar la experiencia de compra que nos hubiera gustado que existiera hace 10 años. Con el servicio de prueba gratuita en casa, enviamos tres monturas a donde nos diga el cliente para que se las pruebe durante tres días, pida opinión a sus amigos y familiares y decida si ha encontrado las gafas que buscaba. Nuestro servicio de envíos contactará con el cliente a los tres días para acordar el horario y el lugar de recogida de las monturas de prueba. Si el cliente decide efectuar una compra, sólo tiene que rellenar el formulario adjunto en el pedido de prueba, o meterse en nuestra web y hacer el pedido”, explica este emprendedor.
La inversión ha sido de 40.000 euros
Web: www.lordwilmore.es