Desde que tienes peques, esas pedazo de fiestas que dabas en tu casa se han acabado. Se han acabado temporalmente, queremos decir. A corto plazo, adiós fiestas. Y, claro, todavía te han sobrado unas cuantas botellas de esto, lo otro y lo de más allá, a las que salvo que quieras que Meg Ryan protagonice un telefilme sobre tu vida, no vas a dar salida ahora mismo. Que sí, que en Navidades descorchas lo que haga falta, pero tienes unas cuantas botellas muertas de risa. Eso por no hablar de esa bodeguita que empezaste a reunir y con la que perdiste el fuelle. Al final, el vino no te sienta tan bien.
Y, claro, ¿qué haces con esas botellas? Porque sumando, sumando, te has gastado una pasta. Si vives en Japón y lees esto, no sufras. Ya puedes revender el alcohol que te sobra en casa. La cadena de compra-venta de productos de segunda mano Hard Off, abre ahora Liquor Off para bebidas.