El dispositivo de Linking Drones recuerda el funcionamiento de una paloma mensajera. El propietario del vehículo lo abre; introduce en su interior lo que quiere enviar siempre y cuando no sobrepase los cinco litros o los tres kilos de peso, que es su capacidad actual; se aleja rápido y luego ya, desde la aplicación del móvil, le da a la opción de enviar previamente determinada por las coordenadas enviadas por el receptor del contenido vía whatsapp. Este espera en el lugar convenido, nunca más lejos de 5 kilómetros, y cuando llega, lo abre, extrae el contenido y, ya cerrado el contenedor, el dron vuelve por donde ha venido.
En resumen, que cualquiera que no haya visto ni tocado en su vida un dron puede manipular éste puesto que no necesita piloto, se orienta con GPS y se alimenta con una batería recargable. Concebido como un producto, no como servicio, Linking Drones quiere poner el uso de un vehículo aéreo no tripulado al alcance de cualquiera, bueno, con permiso de la ley porque hablamos de uno de los sectores más regulados del mundo.
En el equipo de Linking Drones lo saben, por eso, por el momento, solo se dirigen a personas que viven en zonas rurales de montaña y que se conocen entre sí. En realidad lo que están haciendo ahora es recopilar datos y testar el producto para tener la tecnología madura para cuando la legislación autorice el uso masivo de este tipo de drones. La intención es haber comercializado 100 unidades antes de que finalice el año.
“Imagínate enviando un pequeño paquete a un amigo que no se encuentra bien, compartiendo una cerveza fría con un vecino después de un duro día de trabajo o enviando material de arte para un proyecto de última hora. Incluso podrías enviar tu dron a pedir prestado un abridor de vino a casa de tu colega mientras estáis fuera haciendo un picnic con los amigos. Estas son las conexiones que Linking Drones quiere crear con su innovadora tecnología”, afirman desde el equipo.
La startup la integran César Serrano (CEO), Alberto Nuñez (CTO), Andres Martinez (Chairman) y Eduardo Hilario (Software Architect), todos con experiencia en el sector y la tecnología aeroespacial, de aquí que hayan pasado por el programa de aceleración de la Agencia Espacial Europea. Asimismo, son beneficiarios del programa de mentorización y aceleración de La Nave, en Madrid, en cuyas instalaciones se hallan alojados.
Igualmente, Linking Drones figuraba entre las startups a competir en un nuevo track Spacetech creado para esta última edición de South Summit en colaboración con Arribes.

Hacia dónde se dirigen
“Tenemos en nuestro plan de negocio dentro del mercado de los drones llegar a la parte de servicios y ciudades más adelante, pero la normativa no está aún madura por eso hemos empezado por las personas en un modelo B2C y casos de uso en los que sí se puede utilizar el dron», declara Alberto Núñez.
El prototipo actual tiene una autonomía de 10 km (5 ida 5 vuelta) y confían en alcanzar pronto los 20 km. El producto, fabricado con plástico inyectado, saldrá al mercado por un precio inferior a los 1.000 euros porque su deseo es que “la gente corriente como tú y yo” lo pueda comprar para hacer entregas entre particulares, sin intermediarios ni gastos adicionales. El dron podrá adquirirse a través de la web de Linking Drones