Tradicionalmente, los estudios de diseño han resuelto condicionantes como la funcionalidad, la estética, la producción, la comunicación, etc. Pero se debe dar un paso más: mejorar el impacto que tienen los objetos en el medio ambiente y en la sociedad”, sostienen Jon Marín y Alex Jiménez, de Nutcreatives, estudio de diseño de productos que trabaja bajo parámetros ambientales y sociales.
Procesan los objetos como sistemas: “Tenemos en cuenta su ciclo de vida desde que los materiales son extraídos del medio hasta que el objeto llega al fin de su vida útil. Trabajamos para que nuestros diseños tengan un impacto positivo sobre el medio ambiente, la economía y la sociedad”, subrayan estos emprendedores que han contado con el apoyo de la Fundación Banesto y el Ayuntamiento de Sant Cugat (Barcelona). Consideran que el diseño de producto tiene el deber de combinar sostenibilidad y diseño: “Es necesario que estas dos disciplinas vayan de la mano para diseñar objetos mejores y más responsables.
Además, esa combinación da respuesta a nuevas necesidades de mercado, en tanto que clientes y consumidores están cada vez más preocupados por el entorno y el origen de los productos que compran”.
Según el plan de empresa que están elaborando, prevén una inversión de unos 15.000 euros. “Nuestro objetivo para 2011 es crear una estructura empresarial sólida que formalice una colaboración ya consolidada. Estamos creando una red de clientes que nos permita arrancar con una base de trabajo importante. Calculamos poder facturar unos 35.000 euros”.