Si el alumno no tiene tiempo de ir a la autoescuela, la autoescuela tendrá que ir al alumno, ¿no? Con esta idea en mente, la compañía Siemens ha puesto en marcha un plan para que sus 4.500 empleados en España tengan la oportunidad de recibir cursos de conducción ecológica –el objetivo del programa es que los empleados puedan sacarse un carné verde–.
A nosotros se nos ocurre lo siguiente: ¿Y si llevando esta idea un paso mas allá, las autoescuelas entraran además a dar clases dentro de las empresas para que los empleados sin tiempo pudieran sacarse el carné de conducir? Las empresas podrían venderlo dentro de su planes de conciliación, y las autoescuelas se encontrarían con una nueva línea de negocio.