Ahí va una idea Made in Aragón: un parking de bicicletas automático y subterráneo. Biceberg (biceberg.es) recibe y devuelve la bici a pie de calle y además permite guardar otros elementos necesarios para su uso, como la mochila o el casco. El usuario realiza las operaciones mediante una tarjeta chip con código personal secreto, siguiendo un proceso tan sencillo como el de los cajeros automáticos. El tiempo de acceso a cada plaza es de 30 segundos, tanto para su depósito como su retirada. Nos parece una idea que tiene mucho potencial para exportarse. Estamos deseando verla en Holanda, Bélgica o Alemania… para empezar.