Un asesor financiero es aquel profesional de las finanzas que tiene vocación de servicio-cliente, con muchas ganas de acompañar al ahorrador a lo largo del ciclo financiero de la vida, para escucharle –porque ¡cuán importante es escuchar para comprender!– y apoyarle en la toma de decisiones financieras que marcaran su presente y su futuro.
Y siempre, siempre, respondiendo a las necesidades del ahorrador, a sus objetivos, y aun más allá: a sus sueños.
Un coach nunca te dirá lo que tienes que hacer, cómo actuar o cómo responder. Te pondrá delante un espejo para que te mires –¡qué poco nos miramos a nosotros mismos!– para conocer exactamente lo que quieres y lo que necesitas.
Haciéndote preguntas, el coachee (la persona que se sienta delante de un coach para hacer la sesión de coaching) descubre él mismo su objetivo y por dónde quiere caminar. La función del coach es acompañarlo en ese camino.
Si juntamos a un asesor financiero con un coach nos sale un Family Banker, un coach de las finanzas; mucho más que un asesor.
La necesidad de ahorrar es indudable
Hacer una inteligente gestión del ahorro no es un proceso sencillo. Una buena gestión del ahorro implica crearlo, planificarlo y cuidarlo. Y para conseguir todo eso, es necesario contar con un buen asesoramiento constante y continuado en el tiempo que te ayude a saber por dónde empezar, ¿cuál será la mejor manera de ahorrar?, ¿cómo conseguir hacer crecer tu ahorro?, ¿cuánto ahorrarás cada mes?…
Será necesario, por tanto, planificar esos objetivos y definir diferentes estrategias para cumplirlos. A partir de ahí, podremos decidir qué estrategia de inversión será la más adecuada y qué productos financieros se adaptarán a nuestro perfil de inversor.
Y de todo ese exigente proceso se encarga tu Family Banker, que es mucho más que un asesor financiero, porque un Family Banker conoce tus necesidades y objetivos y te ayudará a gestionar todas tus emociones cuando la situación lo requiera.
Compañero de viaje
Un asesor no puede decir lo que pasará, porque no tiene una bola de cristal para adivinar el futuro, pero un Family Banker, con su experiencia en el mundo de las finanzas, sabe cómo apoyar a su cliente para llevar a cabo una planificación y estrategia personalizada. Es un nuevo compañero de viaje, un profesional cercano y de confianza que siempre estará a tu lado.
La única manera de que toda la estrategia funcione es centrarse en el ahorrador y en dar respuesta a sus necesidades. Por eso, el futuro de esta profesión es muy prometedor: un Family Banker será tu ‘yo racional’, aquel que te demuestra cómo decidir con la cabeza fría para cuidar de tu ahorro. Y eso no es cuestión de magia, sino de estrategia bien planificada.
Mujeres Mediolanum: esfuerzo y determinación
Mujeres Mediolanum es un innovador proyecto de Banco Mediolanum, entidad financiera que forma parte del Grupo Mediolanum, que cuenta con más de 1.477.000 clientes asesorados por una red de más de 5.200 Family Bankers.
Este proyecto, aspiracional y motivacional, busca hacer reflexionar y reaccionar a profesionales que quieran emprender, tomar las riendas de su vida y crear su propio proyecto vital. “Personas que quieran crecer profesionalmente y vean en Banco Mediolanum al socio ideal para hacerlo. Ahora es el momento. Es una decisión con mucho presente y mucho futuro”.
Si quieres profundizar más en este proyecto, pincha aquí.
