Muchas de estas tendencias ya estaban, pero ahora se han visto aceleradas por la situación actual.
Emprender para generar impacto positivo, más allá de la rentabilidad empresarial, siempre tiene sentido, pero con la crisis actual más. De aquí que algunas iniciativas en innovación con propósito se hayan puesto de manifiesto como soluciones urgentes y prácticas para combatir, primero, una crisis sanitaria, y, después, las consecuencias de la misma en todos los ámbitos, desde el económico hasta el social.
Durante la crisis que estamos viviendo producida por el COVID-19 y sus consecuencias más directas, en Bridge for Billions, una plataforma e incubadora online para emprendedores, han observado que algunas tendencias han reforzado su importancia y otras han desaparecido por completo. También cómo miles de negocios de todas las industrias se han visto obligados a replantear sus modelos, sus servicios y sus propuestas. De aquí que hayan llevado a cabo un pequeño estudio en el que se recogen cuáles son esas tendencias innovadoras con propósito que han tomado fuerza y que van a seguir desempeñando un papel crucial a medio y largo plazo en una realidad distinta.
“Ahora, cuando todo esto termine, y empecemos otra vez la pregunta que todos tendrán que resolver será: ¿por qué haces lo que haces? Y si no tienen clara la respuesta, tendrán que dejar paso a los que sí. La innovación con propósito (Purpose driven innovation) ha llegado para ser el camino a seguir”, sostiene Adolfo Berraquero, director de Innovación en España de Bridge for Billions
En cuanto a las tendencias que concluyen son las siguientes:
1.-Escuelas digitales y educación en valores
Una de las principales consecuencias de este confinamiento ha sido la adaptación obligatoria de escuelas, y los centros educativos en general de todo el mundo a la realidad digital. Algunos estaban preparados, pero a muchos otros les ha pillado por sorpresa y poco preparados. De hecho, según revela el estudio, solo un 52% de los centros educativos en España, disponen de una plataforma eficaz en internet de apoyo a la enseñanza.
Asimismo, se ha puesto en perspectiva la importancia de centrar parte de los futuros planes educativos en materias relacionadas con el desarrollo de habilidades sociales, emocionales y empresariales, como la empatía, la adaptabilidad a nuevas situaciones y la creación de nuevos negocios.
2.-Comida real y distribución ética
Iniciativas de apoyo al comercio local y de cercanía ha sido una tendencia en alza durante las últimas semanas poniendo de manifiesto las vulnerabilidad de un ecosistema con pocos medios e impacto. Todas aquellas propuestas que se han centrado en plantear soluciones innovadoras de apoyo a colectivos perjudicados como los agricultores, productores o trabajadores rurales han puesto de relieve importantes carencias y la necesidad de fortalecer actividades económicas teniendo en cuenta, entre otras cosas, la accesibilidad y la expansión de zonas rurales.

3.-Ciudades inteligentes y transporte sostenible
Si bien se plantean interrogantes sobre el futuro del transporte público, hay indicios alentadores. Por una parte, los beneficios ambientales generados por los cierres podrían presionar al sector y a las instituciones para que promuevan y regulen los desplazamientos sostenibles en la siguiente fase. Las empresas que rediseñen el transporte público, actualicen nuestras calles para mantener el distanciamiento social y movilicen a los aeropuertos para garantizar los exámenes de salud verán
un aumento de la demanda. Asimismo, las nuevas empresas están dando forma al futuro de la planificación urbana y de nuestros hogares para hacerlos más seguros, eficientes e inclusivos.
4.-Bienestar digital y cultura tras la pantalla
Si durante el confinamiento, las industrias creativas han sido fundamentales para hacer más llevaderas las largas jornadas en el hogar, la paradoja que han sufrido es un fuerte descalabro económico. Multitud de eventos culturales cancelados, instituciones cerradas, prácticas culturales comunitarias suspendidas ha puesto a estas empresas en una situación sin precedentes. Como consecuencia, muchas de ellas deberán replantearse el modelo de negocio si quieren seguir siendo rentables en la nueva realidad.

5.-Trabajo desde casa y productividad
Con millones de personas trabajando desde sus casas durante el estado de alarma, la crisis ha forzado un experimento global para demostrar de forma definitiva si el teletrabajo funciona o no. La confianza, la productividad y la cultura corporativa han sido conceptos fundamentales para su buena marcha y que muchos todavía tienen que implementar.
También en el ámbito laboral se avecinan tiempos broncos, con el cierre de miles de empresas y la consecuente destrucción de puestos de trabajo. Algunos verán en ello nuevas oportunidades de negocio y una nueva forma de trabajar generando un nuevo ecosistema empresarial.
6.-Solidaridad y modelos de negocio con propósito
Emprendedores y empresarios de todo el mundo han empezado a ser conscientes de que las grandes brechas de desigualdad que existen en la sociedad no favorecen a nadie, de aquí la aparición de nuevos modelos de negocios basados en la solidaridad y la inclusión.

7.-Biotecnología, salud y seguridad
En lo que respecta a la urgencia sanitaria, han nacido miles de iniciativas en todo el mundo para apoyar a las plataformas de salud, el desarrollo de vacunas, la fabricación de equipos sanitarios o conseguir un diagnóstico más rápido. Pero también se han puesto de manifiesto otras carencias. Por ejemplo, un sector como el sanitario, que ha sufrido un impacto brutal, se ve obligado a replantearse toda su estructura operativa mientras vive en la incertidumbre. Algo tendrá que decir en este sentido la industria de la gestión de instalaciones.
Ya en el ámbito laboral, uno de los retos es el abordaje de las empresas y grandes infraestructuras de la reincorporación de los empleados a las instalaciones, garantizando su seguridad y minimizando el riesgo de contagio.
Otra de las repercusiones de esta crisis ha sido que la mayoría hemos dejado de ver la ciberseguridad como un problema que atañe solo a las compañías para verla como algo cercano y que afecta a cualquiera en un mundo cada vez más interconectado.
8.-Sostenibilidad y conciencia medioambiental
Tampoco era necesaria ya la crisis para saber que teníamos que afrontar un cambio global para mitigar los grandes daños medioambientales. En los últimos años hemos sido testigos de una evolución de conciencia colectiva después de repetidos escándalos y tragedias relacionados con prácticas de fabricación y producción no sostenibles y poco éticas.
Industrias como la de la moda, la producción de alimentos y las empresas energéticas de todos los sectores buscan respuestas a este desafío y están tratando de adaptar sus mensajes corporativos y tomando decisiones estratégicas para posicionarse en este ámbito, y más importante, lo van a seguir haciendo. Pocos conciben ya el éxito de una empresa que no tenga en cuenta la sostenibilidad como uno de sus principales valores.
9.- Plataformas multiusos y marketplaces
“Uno de los efectos inmediatos de la pandemia con un impacto a largo plazo es este camino hacia la digitalización y la aceleración de la economía de Internet. Es la prueba definitiva para el comercio electrónico y el auge de las plataformas que tienen por objeto satisfacer las necesidades de los consumidores y la colaboración intersectorial de los proveedores de servicios. Internet es ahora la puerta más eficiente para apoyar y colaborar con sus propios vecinos así como con los socios de la industria”.

10.- La tierra prometida: el Fintech
Ahora que, con el confinamiento, muchas sucursales bancarias han permanecido cerradas, parece más fácil entender los problemas que padecen todavía en muchos países por la ausencia de servicios bancarios. Esto supone un importante desafío para los nuevos negocios que se mueven en el entorno Fintech con soluciones financieras sencillas, transparentes y sin compromisos de “ataduras”.