El Internet de las cosas
Es un poco la tecnología que se aplica en las smart city pero en las viviendas. Se trata de desarrollar sensores en los electrodomésticos que conecten los aparatos con una unidad central, de manera que, por ejemplo, la nevera no sólo diga apagado o encendido, sino que sea capaz de conectarse automáticamente con el servicio técnico cuando detecte una avería, determinar cuándo hace falta cambiar el líquido refrigerante o avisar al usuario de que le hace falta comprar más comida. Otra opción es instalar sensores que sean legibles a través del móvil. Ya lo estamos viendo en aplicaciones industriales como los lectores de contadores de agua o las máquinas vending que avisan a la central de la necesidad de reponer mercancía, pero todavía tiene mucho recorrido por hacer.
Tejidos inteligentes
Lo incluimos en este apartado porque vincula tecnología con algo tan casero y tan tradicional como la ropa. Estamos viendo proyectos, como el de Innovalley de Xavier Verdaguer, que ya están desarrollando productos como maletines para el portátil que recargan automáticamente la batería, camisetas que permiten proyectar imágenes o zapatos que se conectan al GPS del móvil.
Reconocimiento gestual
Estamos empezando a ver tecnologías que reconocen las imágenes en 3D y permiten realizar acciones en función de las posturas y los gestos. Las aplicaciones mayoritarias que ya hay se están dando en las videoconsolas (XBox, Play Station 3 o Wii). Es sólo el principio.