La industria del entretenimiento es una de las que más posibilidades tendrá para innovar cuando el metaverso llegue para revolucionar el consumo de Internet. En este contexto, algunas startups están ganando muchos puntos para convertirse en los nuevos líderes de una industria donde la innovación y la creatividad son factores clave.
Una de ellas es Superplastic, una compañía emergente estadounidense que lleva años desarrollando nuevos personajes digitales y tramas de guion que podrían ser un nuevo reclamo para los fans del entretenimiento virtual. Una actividad que les ha valido el apodo de ‘Disney del metaverso’ y que ha hecho que las grandes tecnológicas se fijen en su modelo.
Así, Google Ventures o Amazon ya han invertido en Superplastic, y se suman a una lista de participantes que incluye a grandes celebridades del mundo del entretenimiento, como Ashton Kutcher, quien también es un destacado inversor, Justin Timberlake o Jared Leto, entre otros.
El entretenimiento que se consumirá en el metaverso
Al igual que en su momento consiguió Disney, una de las claves del modelo de negocio de Superplastic es la formación de una comunidad de fans que gastan miles de millones cada año en productos asociados a sus personajes. En el entorno del metaverso, este negocio estaría basado en los NFT que ya mueven grandes cantidades de dinero en todo el mundo.
“Nuestra empresa es un universo de personajes en constante crecimiento. A medida que se vuelven populares, pueden vivir en cualquier mercado digital. Estoy dispuesto a hacer cualquier cosa en cualquier mercado donde pueda entender y preocuparme por la audiencia y puedo hacer algo increíble”, explica Paul Budnitz, fundador de la compañía.
Pero, ¿cómo será exactamente el entretenimiento que se consumirá en el metaverso? Atendiendo a la propuesta de Superplastic, la conexión entre el mundo virtual y el físico marcará la tendencia en las primeras etapas del universo virtual. Los personajes e historias que crean desde la startup permite que el espectador viaje y viva diferentes aventuras a través de, por un lado, el contenido digital y, por otro, los coleccionables físicos.
Así, el comienzo de una historia podría encontrarse en un cómic tradicional –un sector que recupera el pulso tras la pandemia-, mientras que el desenlace podría encontrarse en el metaverso, donde el propio espectador podría moverse libremente o tomar determinadas decisiones que condicionen el final de la historia. En definitiva, la omnicanalidad y la interactividad como principales palancas para transformar la industria del entretenimiento.

Salas de conciertos, eventos deportivos… El metaverso transformará el entretenimiento
Las sagas de animación no serán el único segmento que se transformará por completo en la industria del entretenimiento tras la llegada del metaverso. Otras startups investigan otros nichos, como las salas de conciertos, donde una empresa española ya está consiguiendo grandes resultados.
Se trata de Virtual Voyagers, una compañía especializada en entornos virtuales que tiene su sede en Madrid. La empresa está detrás de más de 200 proyectos de este tipo, pero uno destaca por encima de todos: Horizon Venues, la plataforma para emitir conciertos en directo que Facebook desarrolló el año pasado, y que formará parte del metaverso en el que están invirtiendo miles de millones.
Uno de los grandes atractivos del metaverso que viene es, sin duda, la posibilidad de disfrutar de conciertos y eventos en directo de una forma totalmente novedosa. En este sentido, ya existen algunas pruebas, sobre todo en el sector de los videojuegos, que muestran el potencial de esta funcionalidad.
Un ejemplo de ello es Fortnite, el videojuego online que lleva años organizando eventos exclusivos para sus usuarios, que poco o nada tienen que ver con el propio título. De manera gratuita, su metaverso ha sido el canal para que artistas como Ariana Grande o J Balvin actuaran en directo para un número de espectadores imposible de juntar en un estadio. En abril de 2020, un concierto de Travis Scott en su plataforma obtuvo 27,7 millones de espectadores en directo.