El sentir general de los 3.300.000 autónomos y freelancers que hay en España es que ellos dan más a la economía de lo que reciben, por eso reclaman un cambio en el sistema que se adapte más a su realidad.
La aportación de los autónomos a la economía nacional no es menor. Los cerca de 3.300.000 trabajadores por cuenta propia censados en España suponen el 15% del Producto Interior Bruto (PIB). “Una barbaridad”, en opinión de Xavier Capellades Ramos, CEO de Nomo , una plataforma digital diseñada y dirigida específicamente a autónomos y freelancers. Antes de lanzar su solución al mercado sus impulsores llevaron a cabo un estudio pormenorizado para averiguar la oportunidad de negocio y conocer los males capitales que aquejan a los trabajadores autónomos. Capellades cuenta cuáles fueron las conclusiones.
Hacía dónde vamos
Una profunda transformación del mercado laboral. El cambio se produce a escala global donde, en la era digital, se observa una tendencia al alza de trabajadores que ya no aspiran a desarrollar su carrera profesional en una única empresa sino que prefieren trabajar por su cuenta en diversos proyectos empresariales. Esta preferencia, que en Nomo atribuyen especialmente a los millennials y a los profesionales liberales, llega acompañada de políticas de empresa que optan también por la contratación a demanda conforme a proyectos y objetivos. Como ejemplo de esta tendencia creciente citan a Estados Unidos y al Reino Unido país, este último, donde hay estudios que vaticinan que en 2020 el 50% de su fuerza laboral estará constituida por autónomos. Asimismo, según el estudio Contingent Workforce Survey Study 2016-23 de Ernst & Young (EY), una de cada dos empresas encuestadas dice haber aumentado la contratación de empleados freelance en los últimos cinco años. Y la tendencia se mantendrá ya que el 40% de las compañías esperan incrementar dicha contratación. Sin embargo, el entorno parece no escuchar a la realidad del mercado manteniéndose inamovible ante una realidad cambiante.
Se sienten abandonados. Sin embargo, frente a la inclinación señalada en el punto anterior, el entorno se mantiene inamovible, ajeno a esa realidad cambiante. No hablan solo de una legislación a medida que acompañe a las necesidades de esta modalidad emprendedora, sino también al sector financiero, el asegurador, el empresarial y a la sociedad en general.
Los tres grandes tipos de problemas
En cuanto a los principales problemas que aquejan a este colectivo Xavier Capellades los agrupa en tres categorías:
Gestión: Además de especializarse en una actividad determinada, el autónomo aborda una faceta empresarial para muchos desconocida. Gestionar un negocio, por pequeño que sea, lleva cierta complejidad de aquí que la mayoría recurran a los servicios de una gestoría o profesional especializado. La media de gasto mensual para este concepto está entre los 30 y los 100 euros, aunque la franja mayor se sitúe en los 60 €, un gasto fijo que se suma al pago de las cuotas a la Seguridad Social y otros impuestos. En cuanto a estos últimos, los que más quebraderos de cabeza ocasionan a los autónomos suelen ser la presentación trimestral del IVA y el IRPF. En cualquier caso, y aún tirando de gestoría, al margen de la jornada laboral y sea cual sea el negocio, los autónomos dedican parte de su tiempo libre a poner en orden todo el papeleo o emitir y revisar las facturas, algo que, por regla general, acrecienta su grado de estrés.
Otro problema que detectaron en Nomo es la falta de costumbre de separar las finanzas personales de las de la empresa debido, en parte, a la irregularidad de los ingresos. La consecuencia es que al final pierden la pista a las cuentas del negocio pudiendo encontrarse con desagradables sorpresas en el campo de la tesorería. A veces, ni siquiera son conscientes del sueldo medio que tienen.
Ante este panorama, y como oportunidad de negocio, echaron de menos la existencia de una solución holística que resolviera todos los problemas contables y de gestión en una sola herramienta. “Soluciones sí había- dice Capellades- pero muy fragmentadas y poco intuitivas”.
Financieros: Si cualquier empresa lo tiene difícil para acceder al crédito bancario o ayudas de la Administración, en el caso de un autónomo la situación se agrava dado que la costumbre es trayarlo como un trabajador por cuenta ajena sin productos o lineas de crédito específicos para ellos.
Sociales: Pero no son solo los bancos los que viven de espaldas a la realidad de los autónomos, también las compañías aseguradoras tienen a este colectivo entre sus grandes olvidados aún sabiendo que pocos pueden financiarse pólizas y planes a futuro o ante posibles eventualidades de baja laboral. “Se mueven un poco en tierra de nadie”, afirma Capellades.
Otro problema que dicen observar en este colectivo es el del aislamiento. Cada vez son más los freelancers y autónomos que trabajan desde casa, una situación que, en principio, algunos pueden juzgar interesante pero que si se prolonga demasiado, puede degenerar en un sentimiento de soledad y de impotencia cuando en realidad son más de 3 millones de personas las que comparten esta situación.
La alternativa de Nomo
En vista a todas las carencias señaladas, dicen haber concebido en Nomo la solución que lanzaron al mercado. Nomo es una plataforma digital «que aúna en una app todos los servicios y herramientas vinculados a la gestión del negocio, los impuestos y los servicios financieros de estos profesionales”. La empresa nació en noviembre de 2018 en el venture builder de InnoCells by Banco Sabadell, “con el objetivo de dirigirse a todos los autónomos y freelance de España, independientemente del banco en que sean clientes”.
Asimismo, ofrecen servicios adicionales a su comunidad, que facilitan el día a día de los freelancers gracias a las alianzas con partners como Raisin e iSalud.com. “Gracias a la alianza con Raisin, el usuario accede de forma preferente a productos de ahorro con mejores rentabilidades. En total, los usuarios de Nomo tienen acceso a 65 productos de ahorro de 15 bancos de 12 países de Europa. También en la app se puede acceder al portfolio y comparador de seguros de salud de iSalud.com, que pueden contratarse con un proceso totalmente online”, afirman.
En cuanto al problema de la socialización de los autónomos, la intención de la compañía es crear con el tiempo algún espacio de coworking específico para este colectivo en el que puedan trabajar, relacionarse y formarse.
Desde que salió al mercado hasta ahora, Nomo ha conseguido tener a 20.000 usuarios registrados en la plataforma, 6.000 de ellos activos, en un modelo de negocio B2C. La aspiración es aumentar de forma exponencial la cuantía conforme implementen funcionalidades y convertirse en la solución referente para cualquier tipo de autónomo.