Herramientas como ChatGPT, Gemini y las nuevas funciones de búsqueda de Google están alterando la forma en que los usuarios consumen información en la red. La capacidad de estas herramientas para ofrecer en primera posición del buscador la respuesta a lo que andamos buscando, ha provocado no solo una bajada en el trafico web, sino también un cambio en la forma de posicionarse en los buscadores.
Según datos recientes, entre el 30% y el 40% de las búsquedas que hacemos en internet no generan ya visitas a ninguna otra página web dándonos por satisfechos con la primera respuesta sintetizada que nos ofrece la IA generativa desplazando los listados orgánicos tradicionales hacia abajo. En el caso de los móviles, el porcentaje es incluso mayor, superando a menudo el 50%.
De esta forma, el modelo tradicional de búsqueda, centrado en clics a enlaces y un proceso lineal de navegación, está siendo desafiado por la IA.
Los más afectados
Para las empresas, esto se traduce en una caída de tráfico web que oscila entre el 15% y el 34%, dependiendo del sector. Esta tendencia, conocida como ‘zero-click searches’, se ha disparado en los últimos meses. Las industrias más afectadas por esta pérdida de tráfico corresponden a las finanzas, con un 69% de las búsquedas resueltas directamente en Google sin clics; seguidas por las plataformas de relaciones y citas (58%) y las empresas del sector mascotas (54%).
Así las cosas, los profesionales del SEO, especialistas en mejorar la visibilidad de un sitio web en los resultados orgánicos de los motores de búsqueda pierden control sobre la visibilidad y la presentación de los contenidos por lo que tendrán que evolucionar y adaptarse a las nuevas reglas del juego.
Un rayo de esperanza
Sin embargo, ante el nuevo panorama, los estudios recogen un dato esperanzados: aquellas marcas que logran convertirse en la fuente que Google utiliza para sus respuestas automáticas ven aumentar su visibilidad hasta un 38%.
Ello exige un esfuerzo adiciona en la calidad, originalidad y valor de los contenidos los cuáles han de responder a las preguntas de los usuarios de manera completa y confiable. Tanto que hasta el mismo Google te tome por referencia. Se trata de convertirse en una fuente fiable y estructurada que la inteligencia artificial pueda entender, usar y citar.
Para lograrlo, es fundamental generar contenido de calidad real, demostrar autoridad en el sector y mantener la información constantemente actualizada. Además, es crucial responder con claridad y estructura a las preguntas que hacen los usuarios. Secciones como las FAQs se han vuelto especialmente valiosas dada su estructura fácilmente adaptable a respuestas generativas.
Algunas herramientas
Desde el punto de vista técnico, factores como la velocidad de carga, la organización del contenido y el uso de datos estructurados ya no son opcionales: son imprescindibles. Así lo entienden en empresas como iSocialWeb, una de las agencias de SEO en España que, con diez años de trayectoria, se propone ahora liderar esta transición.
Para ello, han desarrollado soluciones propias, como Growwer, una plataforma que permite publicar contenido en más de 36.000 medios digitales, mejorando la autoridad online de sus clientes. También han lanzado Vuela.ai, una herramienta de generación por IA de contenidos que produce artículos, vídeos e imágenes optimizados tanto para humanos como para motores de IA.
“Las reglas han cambiado y muchas empresas no lo han notado todavía”, sostiene Álvaro Peña, coCEO de iSocialWeb, quien resume la misión actual de su compañía como la de “ayudar a las marcas a convertirse en referentes digitales para que la inteligencia artificial utilice su información como base. El que logre eso, gana. El que no, desaparece”.
Del SEO al GEO
En resumen, la IA generativa no ha acabado con las búsquedas, pero sí las ha transformado exigiendo también al SEO una evolución hacia un enfoque más estratégico y de calidad. Es lo que empieza ya a conocerse como el GEO (Generative Engine Optimization – Optimización para Motores Generativos) cuyo objetivo principal es conseguir que un contenido sea citado y referenciado como fuente en las respuestas generadas por inteligencia artificial generativa.
