El sector del transporte es el principal usuario de los servicios de geolocalización. Este es un mercado donde conviven empresas heterogéneas; por tanto, las necesidades y usos que dan a la tecnología son diversos, aclara Mónica Montalvillo, responsable de Márketing de Moviloc, servicio de gestión y localización de flotas vía Web, desarrollado por el grupo empresarial tecnológico GMV. No es lo mismo una cadena de mensajería urgente que una centrada en productos perecederos o en mercancías peligrosas. En cualquier caso, las herramientas disponibles en el mercado suelen consistir en una web, con un espacio exclusivo para cada empresa, detalla Jaime Castellanos, jefe de área de Sociedad y Pymes de Red.es.
Usos y ventajas
Control de la mercancía en tiempo real. Cualquier empleado puede localizar en tiempo real dónde se encuentra un camión o cuando ha llegado a la plataforma de distribución. Del mismo modo, el cliente tiene la opción de comprobar, minuto a minuto, donde está la carga. Utilidades que ayudan a configurar un servicio con valor añadido.
Planificar paradas técnicas. Existen dispositivos que les informan sobre la gasolinera más cercana; y no sólo eso; también les indicarán aquellas con precios más baratos.
Cambio de planes. Conectado el conductor siempre con la central de su empresa, ésta le señalará recogidas no contempladas, en un principio, en la ruta, pero que puede ser factible hacerlas por la cercanía del vehículo a ese punto. Gómez explica que una de las ventajas del sistema es que permite “no realizar ni un kilómetro sin carga, con lo que el ahorro es brutal”.
Gestión de rutas. Con éstas y otras informaciones acerca de los trayectos y de las incidencias diarias, se generarán informes históricos de las operaciones de la flota. A partir de aquí, y con los datos en la mano, se diseñarán las rutas más óptimas para el negocio, planificando las cargas y descargas de manera milimétrica.
¿Cuánto cuesta?
Instalar un GPS en una furgoneta: 1.000 euros. En régimen de leasing o renting: entre 20 y 30 euros/mes.