Las energías renovables tienen un importante peso en nuestro país. Según los datos de boletín mensual de abril de Red Eléctrica de España, la tecnología con mayor peso en la generación de energía fue la eólica (23,5%), seguida por la hidráulica (22,4%) y la solar fotovoltaica (18,1%). Por tanto, estas tres energías verdes producen casi dos tercios del total de energía generada en nuestro país.
Y esto no ha hecho más que empezar. Según un estudio de la comercializadora de energías verdes Unieléctrica, en España se crearán 468.000 empleos relacionados con las energías renovables, basándose en previsiones y proyecciones del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia del Gobierno, la Organización Internacional del Trabajo (OIT), la Comisión Europea, la Agencia Internacional de Energía Renovable (IRENA) y estimaciones de la Asociación de Empresas de Energías Renovables (APPA) y la Asociación Empresarial Eólica (AEO).
Aunque el reparto de estos puestos de trabajo será muy desigual. El informe ‘Renewable Energy and Jobs’, elaborado por IRENA, detalla que casi la mitad de estos empleos serán creados en tres comunidades autónomas: Andalucía, Castilla y León y Aragón.
En cualquier caso, parece evidente que existe una importante brecha entre la demanda prevista de profesiones especializados en este sector y el número de personas formadas en esta materia en nuestro país.
Con el fin de dar respuesta a este ‘boom’ de las energías limpias, el Gobierno ha anunciado la creación de 20.000 plazas de Formación Profesional vinculadas a las energías renovables, tal y como recogía EFE:Verde.
Aunque es un esfuerzo loable, se queda muy corto, así que las universidades también están potenciando su oferta de formación en energías renovables, con grados y másteres especializados en energías verdes y sostenibilidad. Sin embargo, parece que no están encontrando la respuesta esperada.
Por ejemplo, la Escuela Politécnica de Ingeniería de Minas de la Universidad de Cantabria dispone de 90 plazas de ingreso en sus grados de Recursos Energéticos y Recursos Mineros, pero sólo se han matriculado 55 alumnos, según informa El País.
Y eso a pesar de que la empleabilidad está casi asegurada. El director de la escuela cuenta en el diario que las empresas que visitan las aulas para conocer a los alumnos de los últimos cursos para proponerles prácticas ya se están interesando por conocer incluso a los estudiantes de segundo. Tienen prisa por cubrir las vacantes que se generan.
Los datos de empleo de los egresados de la escuela así lo confirman. A los tres años de terminar el grado de Recursos Energéticos, el 85% de los titulados tienen empleo. El porcentaje no es más alto porque otros muchos siguen estudiando o preparan oposiciones. Entre los que están ocupados, el 81% tiene contrato indefinido y el 100% trabaja a jornada completa. Asimismo, 20 de los 22 alumnos que cursan su máster lo compatibilizan con un trabajo del sector. Los otros dos no lo hacen para poder ir más más rápido.
Además, se trata de empleos bastante bien remunerados. “Los grados relacionados con la energía son muy versátiles. Los chicos que pasan por el laboratorio de ingeniería de proyectos se van a minería, a instalación de parques eólicos y fotovoltaicos, operadores de mercado electrónico… De los que terminaron en 2017, dudo que ninguno gane menos de 45.000 euros”, afirma Marcelo Ortega, profesor de la Escuela de Minas de la Universidad Politécnica de Madrid (UPM), en declaraciones recogidas por El País.
Por otra parte, hay que tener en cuenta que este sector todavía se está configurando, por lo que irán surgiendo nuevas titulaciones que ni siquiera existen todavía. “Hay carreras que aún no se han inventado para el empleo verde, pero el nicho de empleo es importantísimo”, señala Guillermo Martínez, director ejecutivo de la consultora de selección del Grupo Adecco.
Un ejemplo de ello son los perfiles relacionados con la sostenibilidad. Y el puesto de consultor en sostenibilidad es el quinto empleo con mayores oportunidades de colocación, según el estudio ‘Empleos en auge 2023’ de LinkedIn, tal y como contábamos en EMPRENDEDORES. Sin embargo, actualmente no hay grados específicos de sostenibilidad, por lo que se suele contar con titulados en ingeniería o economía.