La filantropía suele ser un atributo común en los casos de muchos de los emprendedores multimillonarios del mundo. Por puro altruismo, por cuestiones de imagen o por ahorro fiscal, los grandes magnates donan una parte de sus ingresos a diferentes iniciativas sociales, con el fin de repercutir -al menos, en parte- su riqueza al bien común.
En este contexto, hace ya 13 años, en 2009, varios de estos emprendedores multimillonarios, con Warren Buffet y Bill Gates a la cabeza, fundaron The Giving Pledge, una especie de club para ricos en el que debaten sobre cómo pueden mejorar en su labor filantrópica. El principal objetivo del grupo es conseguir que los grandes magnates donen, al menos, el 50% de su patrimonio, una iniciativa ambiciosa que cada vez cuenta con más compromisos.
En aquella primera reunión, celebrada en Nueva York, los asistentes no eran demasiados, aunque sus nombres son de sobra conocidos. A los propios Buffet y Gates se sumaron otros grandes emprendedores, como Michael Bloomberg o David Rockefeller, líderes de las grandes familias de negocios americanas. Al parecer, la estrella de la televisión Oprah Winfrey también asistió al encuentro.
Con el tiempo, la lista de grandes emprendedores que se han sumado a The Giving Pledge no ha hecho más que aumentar. Por ejemplo, Mark Zuckerberg o Elon Musk forman parte del club de multimillonarios filántropos, que ha conseguido comprometer alrededor de 500.000 millones de dólares a causas sociales.
Sin embargo, aunque las motivaciones de The Giving Place pudieran ser nobles, no es oro todo lo que reluce. Entre sus principales críticas, la ausencia de plazos para ejecutar las donaciones se lleva la palma, así como el hecho de que no se trata de un compromiso vinculante en modo alguno.
Emprendedores filántropos: el caso de Patagonia

Aunque el número de emprendedores multimillonarios que se convierten en filántropos no ha parado de aumentar en los últimos años, existen casos que aún llaman la atención en pleno 2022. Por ejemplo, el de Yvon Chouiard, fundador de la marca de ropa Patagonia, que hace apenas unas semanas donó el 100% de su empresa para combatir el cambio climático.
A través de una carta pública, el fundador de la multinacional ha anunciado el traspaso del 100% de su empresa, valorada en 3.000 millones de euros, a un fideicomiso. “En lugar de extraer valor de la naturaleza y transformarla en ganancias para nuestros inversionistas, usaremos la riqueza que Patagonia crea para proteger la fuente de todo bienestar”, explica.
A sus 83, Chouinard siempre ha sido un emprendedor atípico. Tal y como él mismo ha explicado en alguna ocasión, nunca estuvo interesado en ser un hombre de negocios. Simplemente, trabajaba como un artesano que fabricaba prendas de ropa para sus amigos, aunque la calidad y los valores de su marca elevaron a Patagonia como una de las empresas de referencia en el segmento de la ropa de montaña.
La donación de Patagonia se produce en un momento de tenso debate sobre la responsabilidad social de los grandes emprendedores del mundo, especialmente los de Estados Unidos. “Espero que esto pueda influenciar una nueva forma de capitalismo que no sea con un pequeño grupo haciéndose rico mientras otro gran grupo se queda pobre”, afirma Chouinard.