Supongamos que puedes pagar 1.500 euros brutos. Muchos emprendedores se equivocan en sus cálculos al multiplicar, la mayoría, esos 1.500 brutos por 12 y por 14, los que creen que aciertan, y por 15 los que han oído campanas y no saben dónde. Si se hiciera así, te encontrarías con una desviación en tu presupuesto de gastos. Pensarías que te cuesta 18.000 euros al año, en el primer caso; 21.000 euros, en el segundo, y 22.500 euros. En realidad son 27.552 euros. Con respecto al tercer escenario habría una desviación de 5.052 euros por empleado. En esta infografía te explicamos por qué.
