La edad media del emprendedor ha subido casi un año en los últimos 12 meses, rayando los 38 años (37,88), y casi dos desde que se inició la crisis (en 2007 estaba en 36 años). Lo más llamativo es el notable descenso de cuatro puntos en el tramo de 25-34 años, y el crecimiento en los tramos más mayores: alrededor de tres puntos en el de 45-54 y casi dos en el de mayores de 55.
Este incremento parece de nuevo relacionado con el paro y la necesidad de autoempleo. Aunque el emprendimiento sigue estando más vinculado a estudios superiores, también han crecido los emprendedores sin estudios o con estudios primarios, lo que va en detrimento de la calidad emprendedora. Se observa una combinación de iniciativas con potencial junto a otras de subsistencia.
En cuanto al nivel de renta, asistimos a una polarización entre las rentas más bajas y las más altas, únicos parámetros donde aumenta la actividad, disminuyendo en los tramos intermedios. Un poco lo que ocurre con la educación, donde aumentan los niveles inferiores de estudios y los licenciados. Disminuyendo en el resto de los niveles.