Presentación de los productos. Utiliza siempre fotografías reales de los productos y distribúyelos de forma que puedas explicar bien las características principales de cada uno de los productos, acompañadas de un título descriptivo.
Política de precios. El precio en Internet es, sin duda, uno de los factores que más influyen en la decisión de compra. No olvides colocarlos bien visibles en cada uno de los productos. Incluso si te mueves en el segmento del B2B.
Promociones. Comunícalas de forma clara, resaltando el precio de la oferta y en un lado el precio no rebajado. Mantén siempre actualizados los precios de tu catálogo y no dejes “olvidadas” ofertas antiguas.
Enlaces. Utiliza enlaces visibles para incentivar la búsqueda de más información sobre los productos o, incluso, para que puedan compartir información sobre éstos a sus amigos.
Servicio post-venta. No olvides incluir las condiciones de pago, las garantías que ofrece tu tienda (tanto al realizar el pago como tras la venta), la política de devoluciones, etc.
