BILBAO. La apuesta por los parques tecnológicos y científicos

“El País Vasco está apostando por un modelo muy original, en el que entran en relación la universidad y la empresa a través de la innovación. Está apostando fuerte por el emprendimiento a través de parques tecnológicos y científicos”, resume Seisdedos. Bilbao, como ciudad principal del País Vasco, tiene mucho terreno ganado en cuanto a comunicaciones, financiación, acceso al mercado, etc.; no en vano, es la mejor ciudad para crear un negocio, según los datos del informe Merco Ciudad 2010. Según este mismo informe, algunos de los principales atractivos de Bilbao son los escasos gastos financieros o la baja cuota impositiva, entre otros. Sin embargo, San Sebastián le sigue los pasos, con mejoras en la inversión pública, la apertura financiera y, sobre todo, en la creación de parques tecnológicos. El Parque Tecnológico de Bizkaia, por ejemplo, tiene convenios de colaboración con la University Science Centre of Philadelphia o la Universidad Concepción (Chile), entre otras entidades. El Gobierno vasco está apostando fuerte por la industria científica y tecnológica a través de Biobasque 2010 (ahora en su segunda fase), iniciativa para promocionar las empresas de biociencia. Entre sus líneas de actuación, el impulso al capital riesgo y la financiación de la I+D+i.

Un ejemplo: Nebutek. Esta empresa especializada en soluciones para el móvil (atención remota a personas sin movilidad, interacción móvil-máquina, etc.), y creada por Asier Arranz en 2009, se convierte en la primera spin off de la Universidad de Deusto. “La mayor ventaja es disponer de un ecosistema y unas instituciones que están muy centradas en el apoyo a nuevas empresas, además de estar rodeados de un entorno históricamente industrial que se encuentra en pleno proceso de modernización”, apunta.
MURCIA. La elegida por las pequeñas empresas

Si hablamos de volumen de negocio, Murcia se sitúa a la cabeza de las pequeñas empresas. Según la Confederación Española de Asociaciones de Jóvenes Empresarios (Ceaje), es la única zona en la que el tramo de facturación de 500.000 a un millón de euros concentra al mayor número de empresas. Un suelo económicamente más accesible y unas buenas conexiones son elementos a tener en cuenta.
La principal área en expansión es el comercio y la venta, pero también las actividades que dan servicio a las empresas; no en vano, la presencia de grandes compañías favorece este tipo de negocio. José Hernández lo vio claro cuando, hace cinco años, creó Emunes (Empresas Unidas Españolas), una plataforma para ayudar a las pymes a través de la captación de clientes (ofrece herramientas de marketing).
PAMPLONA. Una Administración siempre cerca del emprendedor

La Administración autonómica presta un apoyo muy decidido al emprendedor. Además de las ayudas tradicionales (inversión, I+D+i, contratación y formación de trabajadores), la Sociedad Navarra de Garantía Recíproca (Sonagar) ofrece a las pymes condiciones de financiación ventajosas y asesoría financiera gratuita.
José Emilio Mendívil, gerente de Solartia (energía fotovoltaica y biodiesel), destaca el apoyo de la Administración navarra más allá de la ayuda financiera: “El respaldo que sientes cuando quieres emprender un negocio es fundamental, porque te bombardean a preguntas, te generan dudas que nunca te habías planteado”, explica. Pero el apoyo no acaba con la puesta en marcha del negocio: “Está ahí cuando la necesitas. Si tengo un problema, sé que puedo llamar a la Administración y alguien me ayudará”. Si por algo se ha caracterizado Pamplona ha sido por su alto nivel sanitario, lo que la convierte en territorio propicio para empresas auxiliares.

Un ejemplo: Solartia. Grandes del sector de la energía como Acciona, Iberdrola, Gamesa tienen en Pamplona sus núcleos empresariales. De hecho, eso fue uno de los impulsos para crear Solartia. El nicho parece claro, pero hay que tener los pies en la tierra: la presencia de los gigantes puede hacer mucha sombra a los pequeños negocios. Mendívil, sin embargo, ve la botella medio llena: “Que estén aquí las grandes permite estar más cerca de ellos. Ellas tienen más recursos, pero las pequeñas tenemos más cintura”.
SEVILLA. Por costes laborales bajos e incentivos empresariales

Andalucía es una de las comunidades con costes laborales más bajos, por debajo de la media española y la europea. Otra ventaja para emprender es que, al ser considerada Región de Convergencia 1º de la Unión Europea, disfruta de la máxima categoría de incentivos para emprender y modernizar un negocio. Aunque el apoyo no está enfocado sólo a las compañías relacionadas con la innovación, lo cierto es que se apuesta especialmente por sectores estratégicos: aeronáutica (Sevilla es una de las sedes de construcción del avión militar Airbus A400M), agroindustrial (agricultura y las empresas auxiliares, como consultoría, fabricación y venta de elementos auxiliares y servicios), TIC (el 14% de la facturación nacional tiene origen andaluz, y en Sevilla están algunos de los principales parques tecnológicos, sobre todo para el desarrollo de la nanotecnología y domótica) y energético (biomasa, eólica y fotovoltaica). “El mercado de la domótica y la tecnología residencial está en una fase de crecimiento lento pero progresivo, no sólo en el campo de la ingeniería e integración de sistema””, resume Pedro Núñez, gerente de Domonova.

Un ejemplo: Domonova. ¿Las ventajas de ubicar la empresa en Sevilla? “La escasa competencia, las buenas conexiones con Madrid y la Costa del Sol, principales nichos de mercado, y el acceso a mano de obra muy cualificada y escasa en el mercado, que tiene una alta motivación para desarrollar un trabajo vanguardista y tecnológico en su propia ciudad”, expone Pedro Núñez, de Domonova. También tiene claros los puntos débiles: “La mayoría de los proveedores están en Madrid y Barcelona y eso encarece los costes”.
SANTANDER. Compromiso público con las energías renovables

Es una de las ciudades que más empuje está teniendo en el último año, según los datos de Merco Ciudad. Su apuesta decidida por la Formación Profesional pone en el mercado una mano de obra muy cualificada, condición que se añade a la competitividad de los costes laborales para hacer de Santander una opción a valorar. Sin olvidar, además, la colaboración de la Universidad de Cantabria con las empresas incrementa las garantías de un buen resultado.
Las energías renovables se han convertido en una de las apuestas en firme de la ciudad y la región, sobre todo en lo vinculado al poder de las olas. No en vano, allí se va a instalar uno de los principales parques mundiales de aerogeneradores flotantes (que producirán hasta 1,25 MW con las olas del mar) y se estima que la energía eólica marina genere en torno a 70.000 empleos en Europa en los próximos 10 años. El Gobierno de Cantabria está apostando por el sector, por eso forma parte, junto a otras empresas y organismos públicos, de la compañía Idermar.