Carlos III tiene algo más que celebrar que su coronación de este sábado. El monarca se ha mostrado como un hábil gestor de sus finanzas, acumulando una fortuna personal de 600 millones de libras esterlinas (680 millones de euros).
Esta cifra es casi el doble que su difunta madre, la reina Isabel II, que llegó a acumular unos 370 millones de libras esterlinas (420 millones de euros), según el análisis de The Sunday Times Rich List, la lista elaborada por The Sunday Times con las personas más ricas del Reino Unido, del que se hace eco El País.
Las cifras son aún más abrumadoras si atendemos a los datos publicados por The Guardian, recogidos por El Mundo. Según la investigación del medio británico, el patrimonio de Carlos III realmente superaría los 1.815 millones de libras esterlinas (2.000 millones de euros), elevándose hasta los 27.000 millones si se incluye el Palacio de Buckingham y otras pertenencias que disfruta por su cargo oficial.
Entre las posesiones del monarca se encuentran propiedades como los palacios de Balmoral y Sandringham, heredados de su madre y valorados en más de 370 millones de libras.
Además, cuenta con 54 joyas de la Corona, con un valor estimadas de 600 millones, así como la mayor colección filatélica del mundo (110 millones) y diversas obras de artistas como Monet, Chagall y Dalí (27 millones).
También hay que contabilizar su cuadra de más de 40 caballos de carreras, que valer unos 30 millones. Asimismo, dispone de 23 coches, entre ellos que se incluyen automóviles Rolls-Royce, Bentley y Jaguar.
Según explica El País, Carlos III empezó a prestar especial atención a sus finanzas a raíz de su acuerdo de divorcio con Diana de Gales, que le costó 17 millones de libras.
Además, indica que el nuevo rey cuenta con hábitos ahorradores. Por ejemplo, señala que estira todo lo que puede el uso de su ropa o que es muy meticuloso al apagar las luces.
Pero así no se consigue amasar una fortuna de centenares de millones, como bien sabemos el resto de los plebeyos. La mayor parte de su patrimonio, como veíamos, procede de la herencia recibida.
Por otra parte, el monarca ha ahorrado buena parte de las ganancias obtenidas del ducado de Cornualles. “Varias decenas de millones”, según relata un exayudante del rey a The Sunday Times.
El País reseña que el ducado de Cornualles aumentó sus ganancias un 42,6%, hasta los 25,4 millones de libras (29 millones de euros), en el periodo 2012-2022, con el todavía príncipe de Gales al frente.
Así pues, Carlos III ha mostrado cierta destreza a la hora de administrar su dinero. Su exasesor asegura que gran parte de su riqueza proviene de varios movimientos empresariales realizados en las últimas dos décadas.
Por ejemplo, en 1990 lanzó Duchy Originals, una empresa dedicada a la venta de productos de la finca familiar Highgrove House. Sus productos son comercializados en tiendas como Harrods o Fortnum & Mason.
Años más tarde, hizo algunas incursiones en el sector inmobiliario. Uno de estos proyectos fue el desarrollo sostenible de la extensión urbana Poundbury, en las afueras de Dorchester, en Dorset. Después participó en un trabajo similar en Cornualles.
Igualmente, los productos de los huertos de la residencia de Sandringham son comercializados por la compañía Sandringham Apple Juice. Asimismo, los visitantes pueden realizar tours de safari por sus alrededores, previo pago de un tique de 160 libras por persona (181 euros).
Además, hay que tener en cuenta que Carlos III se ha beneficiado sustancialmente de la exención en el pago del impuesto de sucesiones, gracias a su condición de monarca.
Éste es un asunto que está generando mucha polémica en Reino Unido, dando lugar a la publicación de diversos artículos en The Daily Mail en los que se presiona al nuevo rey para que abone dicho impuesto, según indica El Mundo. Y la cantidad no es nada despreciable, ya que podría haber tenido que pagar cerca de 148 millones de libras por la herencia recibida.
Por otro lado, The Guardian recuerda que el rey percibe del erario público una asignación muy superior a la que perciben otras monarquías europeas. Por ejemplo, en 2022 recibió 96 millones de euros, frente a los 8,4 millones que tiene asignada la Familia Real española, tal y como indica El Mundo.
El dinero que reciben la monarquía británica corresponde del 25% de los beneficios del Patrimonio de la Corona, que cuenta con propiedades en algunas de las zonas más exclusivas de Londres y de todo el país, así como el hipódromo de Ascott o los terrenos del parque de Windsor.
También pertenece a la Corona la mayor parte del lecho marino de las islas británicas. En este sentido, cabe recordar que Carlos III impulsó a seis parques eólicos en zonas marítimas de su propiedad, gracias a un acuerdo firmado el pasado mes de enero.
El arrendamiento que abonarán las compañías que explotarán dichas instalaciones permitirá ingresar unos 1.000 millones de euros, que irán a las arcas públicas, ya que el monarca ha renunciado a dichas ganancias, como informaba Cinco Días.