La Iguana de Tijuana ha dado un paso más en su expansión y se ha instalado en la Sala Caravan (Paseo del General Martínez Campos, 17), como complemento a su oferta de música y ocio. Sus hamburguesas sazonadas con los adobos mexicanos de chipotle, pastor y pibil «ya están teniendo mucho éxito entre el público habitual del local», comentan desde la enseña.
La originalidad de La Iguana de Tijuana es que sus sabores están directamente en las hamburguesas, “y no viene a través de salsas añadidas, lo que hace que sean unas hamburguesas únicas en el mercado”, afirman desde la Central de Mexicana de Franquicias, responsables de la creación de esta licencia de restauración y de las franquicias La Mordida y Ricos Tacos.
Los restaurantes mexicanos La Mordida fueron los primeros locales en ofrecer al público estas hamburguesas y, dada su buena acogida, se decidió dar el salto y convertir esta marca en licencia. Es un negocio que no necesita salida de humos, ya que se trata de productos de 5º Gama ya plancheados, que solo hay que calentarlos en el horno o microondas.
La licencia de La Iguana de Tijuana consta de un único pago de 300 euros, a lo que hay que añadir una cuota mensual de 45 euros mensuales durante el primer año, la compra de productos y acogerse a las condiciones de la Central de Compras del grupo.