La idea de crear Yuït nació por la necesidad que sentían sus fundadores, como consumidores, a la hora de buscar opciones alimenticias saludables que les permitiesen disfrutar más de su tiempo libre. «Dedicábamos más de once horas semanales a los preparativos relacionados con comidas que directamente no disfrutábamos y nos dimos cuenta de que, aprovechando ese tiempo, podíamos hacer ¡un millón de cosas que echábamos en falta!», explica Mireia Muñiz Mairal, CEO de la empresa.
Los productos que encontraban en el mercado eran altos en proteínas o sustitutivos, pero con muchas carencias a nivel nutricional: la gran mayoría, con demasiado azúcar, excesos de composiciones químicas, muy pocas calorías… Al mismo tiempo, tampoco resultaban apetecibles.
De esta manera, como nos cuenta la fundadora de Yuït se animaron a diseñar y fabricar un producto ellos mismos para ayudar a quienes quisieran comer de una forma sana, rápida y, sobre todo, ¡riquísima!
Alternativa a la tartera y al menú del día
«Vimos un hueco en el mercado, abordando la necesidad de un formato cómodo, rápido, sanísimo y rico de comida lista, que nos facilitase la vida en el día a día y nos ayudara a ahorrar todas las horas que se gastan en la preparación de comidas de tipo más operativo», explica Mireia Muñiz.
También quisieron ofrecer una alternativa para aquellas personas que todos los días malcomen en el trabajo, tiran de un pesado menú del día o piden comida a través de aplicaciones. «Llevar una alimentación insana diariamente no es saludable ni barato… Yuït es la perfecta manera de comer de una forma mucho más nutritiva y económica ¡sin complicaciones!», asegura la emprendedora.
La puesta en marcha de Yuït comenzó con fondos propios y una apuesta firme por parte de los fundadores. En cuanto a ayudas económicas externas, la primera que recibieron fue de BEAZ, a través de su programa Creación de empresas innovadoras. También recibieron ayudas por parte de SPRI y Seed capital Bizkaia. «Además, abrimos la posibilidad de que accionistas particulares que creyeran en Yuït pudieran invertir a través de la plataforma de Crowdfunding Bizkaia, en la que superamos con creces el objetivo previsto. Fue increíble», relata la fundadora.
Impulso de la ayudas públicas
También recibieron un ENISA; y han ido recibiendo ayudas menores especialmente orientadas a la digitalización y la internacionalización.
Para Mireia «El apoyo de ENISA ha supuesto un impulso importantísimo para nosotros. Fue clave para poder asumir nuestra primera producción de Yuït Powders, testear el mercado y seguir trabajando en el desarrollo de nuevos prototipos. Sinceramente, ¡no sé qué habría sido de nosotros sin esta ayuda! Así que, desde aquí y en nombre de todo el Yuït team, agradecer el apoyo que hemos tenido tanto de fuentes públicas como particulares, que han creído desde el primer momento en el equipo y en el proyecto».
A pesar de las ayudas, este no fue un camino carente de obstáculos. La principal dificultad que encontraron fue la batalla contra las grandes marcas del sector, que «cuentan con presupuestos e inversiones en marketing brutales contra las cuales es muy complicado competir», afirma la CEO de la compañía.
Por otro lado, el hecho de que existan pedidos mínimos a los proveedores de cualquier materia o producto que necesitemos, «obliga a pedir más cantidades de las que inicialmente nos gustaría y eso repercute en un sobredimensionamiento en costes», añade Muñiz.
Guisante, semillas, vitaminas y mucho más
Sin embargo, el tesón dio sus frutos y como resultado, Yuït ofrece un producto único en el mercado en cuanto al perfil nutricional, pues contiene proteína de guisante, mezcla de vegetales, harina de avena sin gluten, semillas de lino dorado, AOVE, mix de muchísimos minerales como el potasio, el cloruro, el calcio, el Zinc… y vitaminas, como, por ejemplo, la vitamina A, D2, B3, E, etc.
Todo eso, sin renunciar al sabor y, como nos apunta Mireia, en catas recientemente llevadas a cabo, el sabor de Yuït fue el elegido por todos los participantes.
La empresa también cuida todo lo relacionado con la sostenibilidad: envase reciclable o reutilizable –como su Yuïter (shaker)–, o el uso de excedentes de cosecha en las formulaciones para minimizar el despilfarro alimentario. También han confeccionado su propio Yuït Dream Book con las bases en las que se sustenta nuestra economía responsable, accesible de manera totalmente transparente en su web.
Ganas de aportar algo bueno
Cuando preguntamos a Mireia cuáles considera que son las claves de su éxito, la emprendedora cita en primer lugar, el avanzado desarrollo I+D que se llevó a cabo para la fabricación de las fórmulas, tratando de conseguir el producto más sano, rico y sostenible posible.
Pero también, lo atribuye al trabajo y el esfuerzo que han dedicado desde el primer momento en el que surgió la idea, así como las ganas y la motivación que sienten por este proyecto, «por ayudar a miles de personas a ser más felices y a disfrutar mucho más de su tiempo a través de una forma de vida saludable y sencilla», comenta la experta.
Como ventaja, destacaría que se trata de un sector con recurrencia de compra. Al final, eso implica clientes con un “lifetime value” largo, rentables en el medio-largo plazo. Yuït no es solo para consumir una única vez, la idea es generar hábitos saludables y cómodos de alimentación mantenidos en el tiempo.
Clientes fieles y cada vez más numerosos
Gracias a la inversión en marketing y publicidad que están inyectando desde mayo de 2023, las ventas han ido cumpliendo los objetivos previstos mes a mes, incluso superando alguna que otra expectativa. «Estos buenos resultados en tan poco tiempo provocaron que lográsemos una importante inversión por parte de un fondo y de dos inversores más. Además, en septiembre comenzamos nuestra expansión internacional en Alemania, donde ya estamos operando», explica Mireia Muñiz.
Actualmente, cuentan con un gran número de clientes fidelizados, «gracias a las suscripciones de nuestro modelo de negocio como las buenas prácticas continuas para mantener el contacto con estos».
La innovación es esencial y continúan desarrollando nuevos sabores de sus principales productos, los Yuït Powders y las Yuït Bars, así como la fabricación de otras líneas de producto, que siguen la línea de bienestar para el consumidor y que verán la luz muy pronto.
Actualmente, su principal reto consiste en «asentar nuestros novedosos productos en el mercado que cada vez más gente se sume a las innumerables ventajas del smart food y comprenda que Yuït es comida, real, nutritiva y completa. Además de, por supuesto, seguir expandiéndonos a más territorios y ampliando nuestra gama de productos, para, cada vez, ofrecer más alternativas, según las diferentes necesidades de cada persona», concluye Mireia.