El fundador de Mercadona habla de los planes de su aceleradora y reflexiona sobre su apoyo al espíritu emprendedor
Juan Roig refuerza el impulso a su aceleradora de startups con una inyección de 10 millones de euros anuales procedentes de su patrimonio personal. Es su segunda gran apuesta por los emprendedores en momentos de grave crisis económica. Lanzadera nació en 2013, en otro momento difícil para el país. “Tras la crisis económica, vi la necesidad de apoyar a los emprendedores para contribuir a la reactivación económica. Así surgió Lanzadera. Es lo que he visto en mi casa toda la vida: si a través de tu empresa eres capaz de crear empleo, se generará riqueza y bienestar en la sociedad”, según señala Juan Roig.
Con otra crisis, otro impulso. Y esta vez mucho mayor. La inyección a Lanzadera forma parte de los 70 millones de euros en concepto de sueldo y dividendos a los que ha decidido renunciar el presidente de Mercadona para destinarlos a reactivar la economía valenciana y española. “Ahora nos enfrentamos a un nuevo escenario económico complicado, por lo que desde Marina de Empresas (que engloba también a EDEM y Angels) creemos que es el momento idóneo para multiplicar nuestra apuesta por el emprendimiento a través de Lanzadera. Destinaremos más recursos económicos, adaptaremos las etapas de mentorización y ampliaremos el espectro apoyando a empresas más grandes. No se trata solo de no parar, sino de acelerar a las empresas, y con ello activar la economía de este país”, explica.
Hasta ahora Lanzadera ha enfocado sus esfuerzos en la activación del empleo y el emprendimiento. En sus siete años de actividad, ha contado con 15 millones de euros para impulsar cerca de 400 proyectos y generar 1.000 empleos en todo el territorio nacional. En esta segunda fase el plan de Roig es mucho más ambicioso, en términos de dinero, de recursos y de generación de sinergias.
“Uno de mis sueños es ayudar a otros emprendedores a que consigan los suyos, explicarles los aciertos y errores que he experimentado como empresario y, en la medida de lo posible, contribuir a que sus empresas crezcan y se consoliden. En Lanzadera, las sesiones con los emprendedores las disfruto muchísimo y siempre me voy con más de un aprendizaje”, asegura el fundador de Mercadona.
Lanzadera siempre ha sido su proyecto más personal. Por eso ahora no quiere limitarse a impulsar nuevos proyectos emprendedores, sino que también quiere apoyar a empresas ya creadas que hayan sido tocadas por el Covid y que necesiten un impulso para seguir creciendo. Es su gran apuesta por el empleo. En las cuatro fases en las que han reordenado el apoyo a los emprendedores (Start, Traction, Growth y Scale up) entran desde la formación y el apoyo económico para facilitar la puesta en marcha de proyectos emprendedores y contribuir a la reinserción laboral, hasta el apoyo a grandes empresas que necesiten reenfocarse para afrontar la nueva realidad. Apoyo con financiación de hasta 500.000 euros (cuando hasta ahora el máximo lo tenían en 200.000 euros).
Roig, además, quiere convertir Marina de Empresas, donde está ubicada Lanzadera, en un gran hub de emprendimiento abierto y de referencia en todo el país. Para esta ambiciosa etapa han creado Lanzadera Space, iniciativa que abre la aceleradora al ecosistema emprendedor, para facilitar el intercambio de conocimiento y experiencias sin necesidad de formar parte de su programa. Inversores, partners tecnológicos y grandes empresas con las que han firmado acuerdos Corporate, que tendrán sus propias oficinas en el edificio, de 9.000 metros cuadrados, para apoyar a emprendedores que se puedan convertir en sus clientes. Otra novedad es la acogida de emprendedores residentes que puedan ayudar a las nuevas startups elegidas por la aceleradora.
Una aceleradora atípica
Lanzadera ha tenido desde su creación un punto diferencial en el ecosistema de startups español. Aparte de impulsar proyectos digitales, ha puesto un especial foco en los negocios de la economía tradicional; siempre que éstos tengan un enfoque innovador. Echando un vistazo al portfolio actual, nos encontramos con propuestas empresariales de lo más diversas, como carne vegetal (Heura), carritos y sillas de paseo (Rocking Baby) o maquillaje natural y ecológico (Saigu Cosmetics), entre los muchos otros proyectos tecnológicos más en la línea de lo que es también habitual en otras aceleradoras.
Lanzadera sigue una serie de criterios a la hora de seleccionar las empresas a impulsar: “Para emprender lo importante no es tener una buena idea, sino saber cómo ejecutarla correctamente. Por eso en lo primero que nos fijamos es en la persona, en el emprendedor. Los emprendedores se arriesgan, son capaces de cambiar el mundo con sus iniciativas. Además, la empresa debe resolver una necesidad o un problema existente de una manera diferente. En definitiva, innovar. Si quieres hacer algo nuevo debes de atreverte a ir a contracorriente. Lo demás está todo inventado”, asegura Juan Roig.
Otro aspecto que la hace diferente es que mantienen una relación constante con los proyectos incubados o acelerados. Y en esta nueva fase quieren fomentar la vuelta de las startups que han sido parte de Lanzadera en el pasado, para ayudarlas a seguir creciendo en un momento tan complicado como el actual.
Ayudar a conseguir sueños
Para facilitar ese intercambio de sueños al que ha hecho referencia anteriormente, Roig tiene un despacho propio en la aceleradora, al que acude con frecuencia. Aunque no se ciñe a una agenda determinada, se presenta de forma habitual para conocer en persona a todos los nuevos seleccionados por Lanzadera. En la aceleradora hay tres fechas de entrada: enero, mayo y septiembre, en las que acogen entre 20 y 30 nuevos proyectos y con todos ellos tiene una sesión como mínimo. Se reúnen en una sala, les imparte formación basada en el Modelo de Calidad Total, desarrollado por él en Mercadona, intercambian dudas e inquietudes y comparten café. El Covid le ha obligado a cambiar algo que está en el ADN de Lanzadera desde sus inicios (que los emprendedores de otras provincias se instalen en Valencia durante el periodo de acogida) pero no ha modificado ni lo más mínimo la forma de trabajar con los nuevos emprendedores, porque él cree firmemente en la importancia de la mentorización de las nuevas generaciones. “En la vida hay figuras que te ayudan a mejorar, que te dan ese empujón tan necesario cuando se está empezando, o que facilitan tu afianzamiento en fases más maduras. Yo también las he tenido, y creo que es parte del éxito darse cuenta de que uno está en condiciones de ayudar, de poner sus recursos y sus aprendizajes al servicio de otros. Si el éxito es compartido, se llega más lejos y sabe mejor. El conocimiento y el dinero dan la felicidad… si los compartes”, concluye Juan Roig.
El modelo de calidad total de Mercadona
Estar en una aceleradora tan estrechamente relacionada con el fundador de Mercadona también marca los proyectos que pasan por ella. “En Lanzadera trasladamos a los emprendedores el Modelo de Calidad Total de Mercadona para que lo conozcan e interioricen, que se inspiren y lo hagan suyo”, comenta Juan Roig. Ese Modelo de Calidad Total se basa en buscar un equilibrio entre las cinco patas de la empresa: el cliente (al que ellos llaman El Jefe), el trabajador, el proveedor, la sociedad y el capital. En definitiva, enseña a los nuevos emprendedores a poner el foco en que el cliente siempre esté satisfecho, cuidando al empleado, colaborando con los proveedores para diseñar ofertas atractivas para el cliente, evitando separar el concepto de empresa de la sociedad en la que opera y, en definitiva, introduciendo el concepto de sostenibilidad en empresas prósperas y rentables. Un modelo que encaja muy bien con el espíritu startupero, realmente, aunque luego cada uno tiene que adaptarlo a su propio modelo de negocio y valores. “Nuestro objetivo no es que lo copien ni imiten: cada emprendedor lo adapta a las características particulares de su startup, independientemente de que sean grandes o pequeñas o del sector de la economía en que operen”, añade Roig.
¿Qué es Marina de Empresas?
Marina de Empresas es el proyecto personal de Juan Roig para apoyar la creación de empresas, el empleo y el fomento de la cultura emprendedora. Un polo de emprendimiento ubicado en la Marina de Valencia constituido por una universidad y escuela de negocios (EDEM Escuela de Empresarios), una incubadora y aceleradora (Lanzadera) y una sociedad de inversión (Angels). Tres iniciativas que se complementan a la perfección en el objetivo de formar, asesorar y financiar a los emprendedores de nuestro país.
Pero son proyectos independientes. Por ejemplo, las empresas que pasan a formar parte del programa de Lanzadera reciben financiación directa de Lanzadera, no de Angels. Es una financiación en forma de préstamos participativos convertibles en unas condiciones muy ventajosas para los emprendedores. Significa que Lanzadera no entra como participada en los proyectos que acoge. Se trata de préstamos para el proyecto y nunca a nivel personal. Angels, la sociedad de inversión, puede invertir en las startups de Lanzadera, pero no es lo habitual. De los casi 400 proyectos impulsados desde su fundación, que han conseguido financiación externa por valor de 50 millones de euros, Angels tan solo ha participado en poco más de un 4% de todos ellos.
Las cuatro fases de Lanzadera
En la nueva etapa que inicia Lanzadera, emprendedores con una idea sin desarrollar, proyectos casi iniciales o empresas ya consolidadas pueden aplicar en cualquier momento del año. La aceleradora decide en cuál de estas cuatro fases encaja:
Start. Esta nueva fase se enmarca dentro de los objetivos de Juan Roig de contribuir a la reinserción laboral de personas afectadas por la crisis. Personas con actitud emprendedora que tengan una idea, aunque no la hayan desarrollado. También puede participar quien quiera liderar proyectos planteados por grandes empresas. A estos emprendedores se les ofrece fundamentalmente apoyo en formación sobre el hecho de emprender y el respaldo económico necesario para el desarrollo del proyecto.
Traction. Es el programa de incubación. Aquí se acogen proyectos en fase inicial que se encuentren en pleno desarrollo del proyecto o que ya estén en el mercado y dispongan ya de las primeras métricas para ver su encaje en el mismo. Es una etapa de acompañamiento, apoyo para incrementar ventas y desarrollar el proyecto de una forma escalable. Pueden recibir financiación de hasta 50.000 euros.
Growth. Es la fase de aceleración en la que ha trabajado tradicionalmente el equipo de Lanzadera. Ayuda a crecer a empresas ya creadas y con un modelo de negocio probado. El objetivo es ayudarlas a disparar sus ventas. En esta fase la financiación puede subir hasta los 200.000 euros.
Scale Up. Es la nueva fase con la que Lanzadera quiere abrir su portfolio a las empresas más maduras y en la que caben startups que necesiten apoyo debido a la actual crisis sanitaria. Para esta fase se escogerán grandes proyectos, con un modelo de negocio probado y rentable, que necesitan apoyo para abordar nuevos retos. Un apoyo que puede suponen ayuda financiera por un valor de hasta 500.000 euros.
Lanzadera cuenta ahora también con el Programa Corporate un espacio para startups de cualquier fase del programa que puedan convertirse en potenciales clientes de grandes empresas como Abanca, Acciona, Ribera Salud, Play Station, FACSA y, por supuesto, la propia Mercadona, entre otras muchas.