Las promesas de este mercado empezaron a materializarse a partir de 2005, año en el que Suiza se convertía en el primer país que admitía el voto electrónico. Desde entonces, la facturación de Scytl ha ido crecido de forma meteórica.
El despegue definitivo llegó en 2011 (+76%), cuando completó su oferta de voto por Internet con otros servicios complementarios. Y el auténtico boom ha sido en el último ejercicio, que la empresa ha cerradp con 24,5 millones de euros de facturación, más del doble que el año anterior. Además, la previsión para 2013 sigue esa misma línea. Este enorme salto se debe en gran medida a la adquisición de SOE Software.
Algunas de las soluciones de la compañía estadounidense eran líderes en EE UU y Scytl ha comenzado a venderlas fuera del país americano, haciendo crecer de forma espectacular la facturación y las previsiones futuras.