EMP. ¿Es cierto que en España no hay mucha afición al consumo de lujo?
C.F. Mire, TNS Sofres ha hecho un estudio sobre lo que piensan los europeos sobre el sector del lujo y ha resultado que un 70% de los europeos lo aceptan como una actividad que crea cultura, imagen y oportunidades. Y los más entusiastas son los españoles.
EMP. ¿Los que compran lujo en España son los extranjeros?
C.F. España es líder mundial en el sector turístico, el mayor del mundo después de EE UU, de modo que es cierto que esto ayuda a impulsar el lujo en nuestro país. Las tiendas de Ortega y Gasset y Serrano hacen más del 60% de sus ventas a los extranjeros. Eso es bueno. El lujo, además de exportar, contribuye a la demanda turística. Me decía un hotelero de Barcelona que los clientes preguntan si el hotel está en la zona de las tiendas de lujo.
EMP. Pero, ¿cuál es el peso del sector español del lujo en el mundo?
C.F. Según un estudio llevado a cabo por las cinco primeras asociaciones de marcas de lujo de Europa, Francia, Inglaterra, Alemania, Italia y España, el 70% de las ventas mundiales de estos productos (en torno a 700.000 millones de euros) son de empresas europeas. Pero España representa menos del 1%. Esto hay que impulsarlo pues es muy interesante económicamente. El 10% de las exportaciones europeas son productos de lujo.
EMP. ¿Confía en que salga una clase emprendedora en el sector del lujo?
C.F. No tengo la menor duda de que así será porque tenemos una juventud creativa, muy bien formada, a la que le gusta viajar y que vive en un país con unas tradiciones culturales muy amplias. Lo que hace falta es organizar todo eso empresarialmente.