El fundador de Tesla y SpaceX, Elon Musk, es en este momento la gran referencia del ecosistema emprendedor mundial. El multimillonario ha vuelto a ser noticia en las últimas semanas tras mostrar sus intenciones de comprar la red social Twitter y cambiar sus políticas para mejorar la pluralidad y garantizar la libertad de expresión de sus usuarios.
Aunque la operación parecía cerrada hace apenas unas semanas, Elon Musk parece haberse guardado un as en la manga que podría dar al traste con la adquisición o, por el contrario, permitir al emprendedor hacerse con el control total de Twitter a un precio muy por debajo de los 44.000 millones de dólares que ofreció en un primer momento.
El “pero” que Elon Musk ha encontrado es la proliferación de cuentas falsas dentro de la red social. El fundador de Tesla ha pedido a la dirección de Twitter un estudio fiable que garantice que el número de bots entre sus cuentas no exceda el 5% del total. De lo contrario, amenaza con echar por tierra toda la operación.
La noticia ha tenido una repercusión inmediata en la cotización bursátil de Twitter, que llegó a desplomarse hasta un 25% antes de la apertura de los mercados. Así, su valor cayó por debajo de los 35 dólares por acción, muy por debajo de los 54,20 dólares que Elon Musk ofreció en un primer momento.
Todo apunta a que se trata de una estrategia del emprendedor para rebajar el precio de la operación, la primera de las valiosas lecciones que Musk está mostrando al mundo a la hora de negociar una adquisición, y que tú deberías tener en cuenta si estás pensando en comprar (o vender) una empresa.

Las 6 lecciones de negociación de Elon Musk
Estar muy informado
La primera de las claves de Elon Musk a la hora de negociar una adquisición es estar muy informado sobre la compañía que va a comprar. En el caso de Twitter, el emprendedor es uno de los personajes famosos más activos en su red social, y a menudo publica sugerencias sobre nuevas funcionalidades y políticas internas para la compañía.
Además, se ha conocido que, un mes antes de comenzar la negociación, el fundador de Tesla mantuvo una reunión con Jack Dorsey, fundador y exCEO de la compañía, en la que debatieron sobre el futuro de las redes sociales, y habló con uno de sus consejeros para interesarse por una posible incorporación a su consejo de administración. En este sentido, cabe destacar que Elon Musk ya era el propietario del 5% de Twitter en ese momento.
Empezar dando pequeños pasos
Una vez consideró que estaba lo suficientemente informado, Elon Musk comenzó su estrategia para comprar Twitter dando un pequeño paso. El 4 de abril, anunció la compra de un nuevo paquete de acciones de la compañía, que suponía el 9,2% del total y que le convertía en el accionista mayoritario de la red social. De esta forma, el peso del emprendedor en la empresa aumentaba de forma considerable, aunque todavía no había revelado sus verdaderas intenciones.
Soltar la bomba
Apenas unos días después de la compra de este paquete de acciones, Elon Musk decide sacar toda la artillería a pasear. Anuncia, a través de la propia red social, que no formará parte del consejo de administración de la compañía, así como que intentará sacar a la red social de la Bolsa haciendo una oferta para hacerse con el 100% de la propiedad.
Sembrar para recoger
Así, Elon Musk se ofrece a adquirir la totalidad de Twitter en una operación de más de 44.000 millones de dólares, una operación que se sitúa un 38% por encima de su valor de mercado el día antes de que la inversión fuese anunciada en público. Tal y como explicó el propio Musk, si la dirección de la compañía no aceptaba dicha oferta, “tendría que reconsiderar mi posición como accionista”, una amenaza de la que se desprende la cuarta lección del emprendedor al negociar una adquisición: recoger los frutos de los primeros pasos.
Rodearse de un gran equipo
Aunque Elon Musk está demostrando ser un genio como negociador, rodearse de un equipo de primer nivel es una de las claves de su éxito. En este sentido, el emprendedor ha sabido contar con un capital humano experto en detectar posibles fallas en la operación a las que agarrarse a la hora de negociar. Hasta que llegó el momento de abrir la caja de pandora…

Aprovechar las rebajas
Después de haber constatado que ningún inversor ofrecía más por hacerse con el control de Twitter y dedicar varios días a anunciar en público sus planes para la compañía, Elon Musk ha dado el paso definitivo para sacar el máximo provecho del acuerdo. El magnate amenaza con echar por tierra toda la operación si Twitter no demuestra que el número de cuentas falsas en la red social se sitúa por debajo del 5%, algo que la dirección, de momento, no ha podido conseguir.
En el caso de que no lo haga nunca, el modelo de negocio de la empresa quedaría en evidencia -gran parte de sus ingresos provienen de la publicidad, que se establece en base a, entre otras cosas, el número de usuarios activos-, pudiendo terminar de la peor manera. Por el camino, todo parece indicar que Elon Musk podrá hacerse con la compañía por un precio mucho más bajo de los 44.000 millones ofrecidos en un primer momento.